El hallazgo ocurrió ayer, cuando al abrir el nicho para enterrar a una mujer que había fallecido, encontraron dos cuerpos más, de dos bebés, que no estaban registrados. En principio, se comunicó el descubrimiento a la Guardia Civil, al desconocer las circunstancias de los hechos, con el fin de que se abriera una investigación.

Sin embargo, posteriormente se ha podido saber que los dos cuerpos corresponden a dos bebés de la familia propietaria del nicho, que fallecieron durante el parto o nada más nacer, y que por lo tanto no habían sido bautizados. Este extremo impedía en aquel entonces que fueran enterrados en camposanto, por lo que no fueron registrados.

Además, fuentes cercanas al caso indicaron que la familia está "consternada" por el hecho de que esto haya trascendido, al tiempo que pidió que no se hagan más especulaciones al respecto.