Tras más de un mes de bloqueo, el Ayuntamiento de Benidorm ha retomado las obras de prolongación del polémico carril bici por mitad de la calzada en la avenida de Jaime I, que en un futuro conectará con el Cruce y la avenida de Alfonso Puchades. La ampliación de esta vía para ciclistas quedó temporalmente paralizada a finales de marzo por un acuerdo plenario, en el que la oposición forzó al gobierno local, del PP, a aplazar la creación de nuevos carriles de este tipo hasta la elaboración de informes técnicos que respondieran a las dudas generadas entre vecinos y usuarios sobre su seguridad.

Los trabajos de asfaltado llevados a cabo estos días por el Consistorio en la parte alta de esta avenida y en el Cruce han traído aparejados la reserva de un amplio espacio en mitad de los carriles por donde circulan los vehículos para poder prolongar el carril bici hasta el final de Jaime I. Ahora bien, desde el área de Movilidad afirmaron ayer que este nuevo tramo no se pintará de rojo y se señalizará con las marcas viales hasta que no se apruebe de manera definitiva en pleno el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), elaborado por la Universidad de Alicante, y que, además de los informes del ingeniero municipal de este departamento, es el principal documento en el que el ejecutivo municipal sustenta su defensa a la configuración de esta vía para ciclistas.

El edil de Movilidad, José Ramón González de Zárate, afirmó que el PMUS «ya tiene la aprobación inicial del pleno y no ve ningún problema en la ampliación del carril bici por mitad de la calzada», pero insistió en que no van a saltarse los pasos y esperarán hasta que el documento sea definitivo.

Mientras eso ocurre, el edil explicó que este amplio espacio, por el que muchos conductores no sabían ayer si tenían que circular o no y en qué dirección, se utilizará «como carril de emergencia y seguridad». De Zárate justificó que se han anticipado los trabajos de adaptación por el hecho de que «el asfalto de esta avenida estaba muy deteriorado y se ha aprovechado que las máquinas estaban en el Cruce para rematar Jaime I», dejando el futuro carril bici «preparado» hasta que se pueda señalizar.