No limpiar los orines que deje en una esquina o por donde pase tendrá una sanción en Finestrat. El Ayuntamiento aprobó ayer la modificación de la ordenanza de Convivencia ciudadana en el espacio público con la finalidad de que los vecinos que pasean con sus canes u otro animal se conciencien y dejen limpias las zonas en las que hagan sus necesidades.

La ordenanza, según fuentes municipales, incluirá a partir de ahora una sanción de 100 euros para aquellos que no cumplan con la medida y no limpien los orines en las calles o en cualquier lugar donde estén. Pero además, recoge que los dueños tendrán que llevar una botella con agua para verter sobre las zonas.

Con esta medida se pretende evitar la «degradación del espacio público y el mobiliario urbano, además de mantener más limpia la localidad y con mejor salubridad», según indicaron las mismas fuentes.

«Tenemos muchos problemas de suciedad y deterioro de mobiliario urbano con motivo de las deposiciones que dejan las mascotas», explicó el alcalde Juan Francisco Pérez tras el pleno donde la modificación recibió el apoyo de todos los grupos políticos. Por tanto, es «necesario» que los propietarios «tomen conciencia y además de recoger los excrementos, dejen limpia la calle de orines». .

Primero, un aviso

Por ahora, la medida será informativa, es decir, se avisará de esta novedad a los vecinos para despiés «ser más contundentes»y llevar a cabo esas sanciones «a quienes no cumplan las normas», apuntó el primer edil. Y es que «tenemos un pueblo maravilloso que, a veces, se ve ensuciado por heces y orines de animales que no tienen culpa, pues la responsabilidad es única y exclusiva de sus propietarios», concluyó el alcalde de Finestrat.