Benidorm cuenta cada vez con más población extranjera empadronada, sobre todo, ingleses que han hecho de la ciudad su segunda casa. Y, con ello, aumenta la necesidad de hacer trámites municipales que muchas veces escapan a su entendimiento, entre otras cuestiones, porque el idioma se convierte en una barrera para ellos. Así que el Ayuntamiento de la capital turística quiere que la atención e información que se ofrece en el edificio consistorial sea más específica y, para ello, recurrirá a una empresa externa que será la encargada de contratar personal que conozca no solo los dos idiomas oficiales de la Comunidad Valenciana, sino que tenga amplios conocimientos de inglés.
El gobierno local ha sacado a concurso este servicio de información presencial y telefónica, un contrato cuyo precio de licitación es de 67.000 euros (IVA incluido) y con una vigencia de un año. En concreto se incluyen dos servicios de Información: uno presencial, ubicado en la entrada principal del Ayuntamiento; y otro de información telefónica. Adscritos ambos servicios al área de Atención Ciudadana. El adjudicatario deberá «contratar por su cuenta al personal preciso» para cumplir con estos servicios, según la documentación a la que ha tenido acceso este diario.
Pero, ¿qué requisitos tienen que cumplir las empresas que quieran optar a esta concesión? Pues deberán «presentar proyecto organizativo con asignación de puestos de trabajo, categorías profesionales, turnos y horarios» y deberá «garantizar en todo momento la atención correcta y diligente» en ambos idiomas oficiales de la Comunidad Valenciana, así como en inglés. Porque entre las especificaciones está que los informadores tendrán que tener el nivel mínimo del B1 acreditativo mediante título oficial; o «estancia mínima acreditada de un año en un país con certificado de formación en este idioma con titulación de origen; o nativo de inglés». Y como curiosidad, deberán ir con uniforme.
Esta atención a los ciudadanos se hace por medio de funcionarios que son los encargados de atender a todo aquel que se acerque hasta el servicio de información de forma presencial. Y también se ha reforzado en los últimos años por medio de los jóvenes desempleados menores de 30 años con el programa Empuju. Pero ahora, el Ayuntamiento recurrirá a una empresa externa para seguir con ello y ampliar la atención a la que no llega con el personal municipal. «El motivo de contratar a una empresa es para mejorar la atención a los ciudadanos», indicó la concejala de Participación Ciudadana, Ana Pellicer, quien apuntó que «sobre todo a los extranjeros». Porque el 33% de los empadronados en Benidorm son ciudadanos de otros países y también se han convertido en uno de los colectivos que más llaman para hacer consultas.
Pero además, en los últimos meses, las llamadas para hacer gestiones o preguntar por aspectos como las ayudas por la crisis sanitaria han aumentado. Tanto que, en algunos momentos del día, es complicado conseguir contestación por teléfono o hay una cola de gente esperando en el puesto de información. Así que se necesitaba un «refuerzo» para este servicio y también con profesionales que hablaran inglés.
Entre otras cuestiones, porque los residentes extranjeros se encuentran más cómodos cuando pueden preguntar o se les da la información en su idioma. Pellicer añadió que «además con este servicio cumplimos también con los criterios del Destino Turístico Inteligente (DTI)» que, entre otras cuestiones, incluye la modernización de la administración.
SATE Servicio de traductores para atender a turistas
Los profesionales que sepan inglés para atender a los ciudadanos de otros países no se limitan al Ayuntamiento. El Servicio de Atención al Extranjero (SATE) de Benidorm también incluye un servicio de traductores que también licita la administración local.
