Prevenir incendios, proteger el entorno natural y eliminar especies invasoras. Estas son las actuaciones de mantenimiento que está llevado a cabo el Ayuntamiento de Altea, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, en el Barranc de La Braña que drena las aguas de la parte central de la sierra Bèrnia, por encima del club de golf Don Cayo, hasta desembocar en la playa de La Olla. La labor municipal se centra en los últimos 900 metros del cauce, entre la playa y los viveros que hay junto a la carretera CV-755 que enlaza la N-332 con Callosa d’En Sarrià.

El concejal de Medio Ambiente, José Orozco, ha explicado que las tareas de mantenimiento del barranco “responden al compromiso de actuación durante dos años que tenemos con la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), organismo que procedió a su limpieza general el año pasado”.

El barranco de La Braña tiene una longitud aproximada de tres kilómetros y medio. Orozco ha señalado que en su último tramo de 900 metros de longitud “hemos detectado el rebrote de especies invasoras como la caña común (Arundo Donax) que se ha convertido en uno de los principales problemas ecológicos con una grave agresión a la calidad ecológica del lugar, además de su impacto negativo en las especies autóctonas, y que genera graves problemas en la gestión de incendios forestales y en los episodios de inundaciones”.

Actuación en el barranco La Braña para eliminar la caña común.

El edil ha afirmado que la caña común “es una especie invasora con gran potencial colonizador que está incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, por lo que constituye una amenaza grave para las especies autóctonas”. Y ha revelado que las cañas “se extienden por sus rizomas subterráneos que crecen formando largas colonias de varios kilómetros a lo largo de los cursos de agua o donde se acumula agua freática o humedad”.

Para combatir los daños que produce la Arundo Donax, José Orozco ha indicado que actualmente “se están desarrollando tareas destinadas al mantenimiento de las coberturas opacas que se hicieron el año pasado con la extracción de cañas, colocación de mallas anti hierba y construcción de taludes”. Además, se está llevando a término “la eliminación de los rebrotes de la caña, y la recogida de una importante cantidad de basura arrojada a este enclave natural”. El edil ha asegurado que “de momento” la zona “está prácticamente libre de depósitos”.

Por último, José Orozco ha apostillado que con esta actuación de mantenimiento “se pretende mejorar la calidad del paisaje, la función de este barranco como corredor ecológico y refugio de especies de la flora y fauna autóctonas, y la función de filtración de contaminantes”.