Hace algunos años, lo típico era que en las comuniones el niño disfrazado de marinerito o la niña engalanada con su vestido de princesa acabara de barro hasta arriba, tras pasarse toda la tarde jugando con sus amigos a pillar o al escondite en el recinto del restaurante donde se celebraba el convite. Ahora, las reglas del juego y el juego en sí mismo han cambiado. Lo que se estila es que el niño cuente con muchos más medios para jugar con sus amiguetes. Castillos hinchables, toros mecánicos, colchonetas, payasos, magos? Estas son algunas de las diferentes opciones que ofrecen empresas de animación en Alicante.
La magia sí es un juego de niños
Francisco Jiménez, además de organizador de eventos para niños, es uno de los personajes que los entretiene. Desde hace algo más de un año, su segunda identidad es la del Mago Franvic, y divierte a cientos de niños con los trucos que le ha enseñado su maestro, el Mago Dexter.
Los orígenes de su empresa, Eventos Franvic, se remonta a 2007. En ese momento, quería alquilar un castillo hinchable para su hijo de 3 años. Al tratar de contratarlo, tomó contacto con el mundillo de los eventos para niños y acabó metiéndose de lleno.
Ahora, su negocio se ha expandido y, además de dar servicio a las comuniones, trabaja con colegios, ayuntamientos, asociaciones, etcétera. Su empresa, junto a los hinchables y atracciones, ofrece alternativas como el toro mecánico o la fiesta de la espuma, además de animaciones y talleres, así como discomóviles con deejays, para todo tipo de celebraciones.
Jiménez asegura que todas sus atracciones disponen de seguro de responsabilidad civil y monitor. "Sé que hay empresas más baratas, pero mis productos están en perfecto estado y aportan una gran calidad", señala el empresario.
En lo que se refiere a su papel como mago, señala que a los niños, más que sorprenderles con el gran juego de manos, hay que hacerles reír durante toda la función. Ese, para él, es el rey de todos los trucos.
