La participación del poeta Miguel Hernández (1910-1942) dentro del proyecto cultural y educativo de las Misiones Pedagógicas, y en concreto dentro de la provincia de Salamanca, investiga en la actualidad el también poeta y profesor José Luis Puerto, principalmente a partir de testimonios orales.

Se trata de un trabajo que Puerto (La Alberca -Salamanca-, 1953) realiza desde hace más de un año y que expondrá en forma de ponencia durante el congreso que, organizado por el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, conmemorará en 2010 el primer centenario del nacimiento del poeta alicantino.

Así lo ha explicado hoy a Efe Puerto, una semana después de recibir como una "grata sorpresa" su nombramiento como nuevo Juglar de Fontiveros por parte de la Academia Solar de la Poesía, con sede en esa localidad abulense donde nació San Juan de la Cruz.

Tras agradecer este reconocimiento por parte de un grupo de poetas entre los que figuran "amigos" suyos como Antonio Colinas, José María Muñoz Quirós o Gonzalo Santonja y que recibirá en forma de título el próximo 14 de diciembre, el escritor salmantino ha desvelado algunos de los aspectos del trabajo relacionado con el paso de Miguel Hernández por Salamanca.

Tras más de un año de investigación en hemerotecas y a través de testimonios de personas que le conocieron, José Luis Puerto ha indagado en un "episodio biográfico" desconocido del poeta de Orihuela: su paso por las Misiones Pedagógicas en la zona salmantina de Vitigudino en el año 1935, en pueblos como Princones y Ahigal de Villarino.

Las Misiones Pedagógicas fueron un "proyecto cultural de la República", que pretendía "llevar al pueblo y a los campesinos la cultura de la ciudad", todo ellos bajo la "filosofía de la Institución Libre de Enseñanza y la inspiración de Manuel Bartolomé Cossío", ha explicado este profesor de literatura del Instituto de Educación Secundaria Lancia, en la ciudad de León.

Desde su punto de vista, esa iniciativa representó el "sustrato cultural de la Generación del 27 y de la Residencia de Estudiantes".

Se trataba de acercar a las zonas rurales más deprimidas valores morales y espirituales, principalmente a través de la cultura en forma de cine, teatro y recitales mediante "museos y bibliotecas circulantes" coordinadas por escritores como Miguel Hernández, María Zambrano, Federico García Lorca y Carmen Conde, además de pintores entre los que destacaron Ramón Gaya y Eduardo Vicente.

Puerto, afincado en León desde hace más de una década, ha explicado cómo se conocía la participación de Miguel Hernández en este proyecto, pero "no se sabía con precisión" los lugares por los que había pasado, ni tampoco los compañeros con los que había compartido la experiencia, ni la programación, ni lo que hicieron en cada pueblo.

Estos aspectos serán desvelados por él durante el congreso que tendrá lugar el próximo año para conmemorar el centenario del nacimiento de Miguel Hernández.

Aunque descarta publicar un libro del paso del poeta alicantino por Salamanca, sí considera interesante realizar una publicación con las Misiones Pedagógicas en Castilla y León, ya que es un trabajo que "está por hacer".

José Luis Puerto acaba de publicar "Nueve poemas de marzo", un pequeño poemario con nueve composiciones de verso libre y que ha subtitulado "Devoción marroquí" como recuerdo de su paso, el pasado marzo, por ciudades como Fez y Rabat, donde protagonizó varias lecturas de versos suyos invitado por el Instituto Cervantes.