El Orihuela sigue sumando jornada a jornada y con su empate sin goles ante un Barça B plagado de todas sus figuras en Los Arcos, se ha situado a solo dos puntos del puesto de promoción de permanencia, tras la derrota del Mestalla en Tarragona frente al Nàstic (2-1) y a tres, es decir a un partido, de la salvación, que actualmente ocupa el Ejea, que perdió (0-1) con el líder Castellón.
El equipo escorpión sacó un empate muy trabajado en un partido en el que el filial azulgrana tuvo el mayor porcentaje de dominio, pero las ocasiones más claras fueron para los oriolanos, que jugaron desde el minuto 60, con inferioridad numérica, por la expulsión por doble amonestación de Luis Gilabert , y no se notó en el terreno de juego.
Chechu Flores estrelló el balón en el larguero en la primera parte y, en el tiempo añadido, casi al final del encuentro, Migue Marín y Rodri pudieron darle la victoria a su equipo con sendas oportunidades de gol.
Los primeros cinco minutos fueron de claro dominio escorpión, pero después se asentó el Barcelona B y se hizo con el control del partido durante bastantes minutos en los que, con las líneas excesivamente adelantadas y a base de toque, buscó alguna jugada que le llevara a generar peligro ante el marco de Marcos Morales. Sin embargo, la defensa local estuvo muy atenta a todas las acciones y cortó toda posible jugada de ataque visitante.
Balón al larguero de Chechu
En esos minutos en los que el filial azulgrana controlaba la pelota, el Orihuela decidió encarar el partido a base de balones largos para alejar el esférico lo máximo posible de su área, y contragolpes rápidos que buscaban sorprender a la zaga catalana.
El partido se fue igualando cada vez más en la fase final de la primera parte en la que, en el minuto 41, Chechu Flores tuvo en sus botas la ocasión más clara con un disparo que se estrelló en el larguero.
En la segunda mitad, Brian pudo adelantar al Orihuela al recibir un buen balón de Chechu en el minuto 58, pero lo evitó el portero visitante Iñaki Peña. Se empezó a encontrar cómodo en el campo el conjunto amarillo, pero en el minuto 60 fue expulsado Luis Gilabert.
El gran trabajo, esfuerzo y sacrificio realizado por todos los futbolistas del conjunto hizo que el filial blaugrana no pudiera aprovechar su mayor número de jugadores para ganar el partido. El equipo de Albadalejo defendió a la perfección y, cada vez que tenía ocasión, salió a la contra para tratar de sorprender.
Si bien el Barcelona B, comandado en el centro del campo por mediación Riqui Puig y Monchu, gozó de muchos acercamientos y centros al área, no tuvo ocasiones claras. En uno de esos acercamientos, el Orihuela salvó la situación entre Marcos Morales y Badal. Gerard lo intentó ya en la recta final del partido con un chut que se fue a las manos del portero oriolano, y ya no hubo más disparos entre los tres palos del equipo visitante.
Así se llegó al tiempo añadido, en el que el Orihuela se fue hacia arriba en busca de una victoria que le habría acercado a solo un punto de los puestos de salvación directa. Migue Marín tuvo la oportunidad de conseguirlo, pero su remate se marchó fuera por muy poco. Y en la siguiente jugada fue Rodri quien tuvo en sus botas el gol, pero el guardameta visitante quien logró despejar a córner con sus manos, en una acción muy apurada.
La respuesta del Barça B llegó inmediatamente con chut de Monchu que se marchó fuera muy cerca de la portería, en una jugada de balón largo que sorprendió al Orihuela.
Un punto que sabe a poco
El empate sabe a poco al equipo de Gerard Albadalejo por el buen trabajo y el esfuerzo realizado frente a uno de los mejores equipos del grupo, pero que le sirve para acortar distancias en su objetivo de salvar la categoría. Tras esta jornada, el Orihuela, que no logra abandonar la última posición, se acerca a dos puntos de la promoción de permanencia y tres de la salvación directa. Todo es aún posible.
