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¿Qué le sobra y qué le falta en la vida?

«Sorprende que en este mundo muchos orienten su vida a lo que es accesorio»

Me ha parecido interesante plantearse que es lo que de verdad importa en la vida. Sin duda el momento en que uno se plantea la pregunta es clave en la respuesta, como el sexo y el país en el que vives, o cuál es tu etnia. Sin duda la respuesta es personal, y es cambiante de un momento vital a otro. Voy a intentar describir lo que son mis ideas, generalizando sobre el tema.

Sorprende que en este mundo, lleno de personas inteligentes muchos orienten su vida a lo que es accesorio, a lo no importante, que lo priorizan y al revés relegan a un segundo lugar lo que en realidad lo es. A veces confunden urgente con lo importante, aunque en general tendemos a no valorar lo que tenemos, sea la salud, el dinero o el amor, y cuando lo perdemos vemos su importancia.

La salud es más valorada por los que tienen más años. A mi juicio por dos motivos: con los años han visto a muchos caer enfermos y/o morir y por otra parte es muy fácil que con los años se empiece a tener goteras, al envejecer la salud suele faltar en algún terreno.

Respecto al dinero, a las riquezas, les diría que conozco a muchos que no les faltan o incluso que les sobran, las tienen en exceso y no se sienten bien, e incluso sé que son desdichados. Tiempo atrás les decía que los keniatas consideran que el que tiene un ganado tiene un problema. Y conozco otra mucha gente que no tiene riquezas y son felices. Ello es así porque en realidad sentirse bien no depende en sí del dinero sino de cómo valoramos o interpretamos lo que tenemos. Pero no dudo que es meta en la vida para muchos. Yo, en broma digo que tienen el complejo de tío Gilito. Les sobra, incluso jamás en vida gastarán lo que tienen, con lo que están destinados a ser los más ricos del cementerio, sin embargo no paran, luchan, y a veces hacen indecencias para tener más. No dudo que sería magnífico que todos tuviéramos casa propia, pero de verdad ¿cree que su vida cambiaría mucho si en vez de ser propietario vive alquilado?.

Y respecto al amor, sí que les digo que nos debiera sobrar a todos. Darlo es gratis y recibirlo aún más, y deberíamos saber que darlo nos hace sentir bien. Así, si Ud. cree que le falta porque recibe poco, esfuércese en darlo más, seguro que en poco tiempo recibirá más, y se sentirá bien. Los que lo dan saben que nunca se les agota, y lo curioso es que cuanto más dan más tienen. Es una pena que en nuestro mundo no lo hayamos aprendido, y en él predominen las guerras o el terrorismo, que en esencia son la expresión del no amor o el odio. Yo me detengo, pienso, y le invito a que Ud. lo haga, que reflexione para seleccionar sus prioridades. No tenga duda, cuanto más ame será más feliz, la vida le será más plácida e incluso puede que se note que fluye, que flota. Es una experiencia única, genial. Plantéesela como meta.

Les comento, asumiendo el error de la generalización, cual serían a mi juicio las respuestas de:

Los niños, a ellos les sobra, energía sueños e ilusiones, y ambicionan crecer, quieren ser adultos. Yo recuerdo que cuando era niño muchos amigos empezaban a fumar porque el que lo hacía era un machote, un ser viril, como el vaquero valiente del oeste, imagen que las tabaqueras ponían en las cajetillas para estimular el consumo. Posiblemente también les falten límites y entender la realidad.

A los adolescentes, en general les sobra la curiosidad, quieren conocer mundo y ganar autosuficiencia. También quieren destacar, ser buenos en algo: con las chicas, bebiendo, en clase o los deportes. En ocasiones ello se acompaña de exceso de ingenuidad, y de ilusión, que el propio día a día irá limitando. Suelen sobrarles deseos, o ambiciones, lo que es magnífico porque así se construyen metas grandes, lo que para Lauren Bacall es importante para no perderlas mientras se persiguen. Como es natural les falta experiencia, que sería aquello que sabes, que aprendes, tras vivir un hecho o circunstancia. Es fácil de entender que entonces no han tenido tiempo para gastar mucho de sus vidas y adquirir o tener experiencia.

En la madurez empieza a creerse que lo importante es ser feliz, puede necesitarse seguridad y a veces abunda, no sé si sobra el esfuerzo, o como antes comenté, la responsabilidad. En general la realidad se nos impone.

En mujeres de edad media. Un grupo de mujeres que conozco se reunieron en tertulia para dar respuesta a esa pregunta. Las respuestas fueron muy variadas, pero en general les sobraban preocupaciones o si quieren estrés o ansiedad. Y respecto a las carencias predominaba la falta de tiempo.

A los hombres mayores, yo hubiera escrito viejos, pero no lo he hecho no por coquetería sino porque no querría molestar a nadie: Yo tengo setenta años, y puede que hace pocos hubiera contestado como ellas. Sin embargo hoy diría que me falta juventud, queriendo decir energía para hacer reales mis proyectos, que son muchos y los quiero realizar ilusionado. Por otra parte si ellos me faltaran diría que soy viejo, y esa actitud se puede tener en cualquier momento, a los cuarenta o cincuenta años , aunque confieso que debe ser más habitual con mayores edades. También diría que se valora mucho la salud. En cuanto a lo que me sobra le diría que casi todo. Cuando era más joven tenía mayores necesidades o deseos, ahora prácticamente no necesito nada. Mucho de lo que acumule años atrás hoy me sobra, creo que puedo prescindir de casi todo. También le diría que antes me sobraban preocupaciones, pero al pasar el tiempo y disponer más de él se han transformado en ocupaciones.

En la canción a la que me refería al inicio se decía que si tiene un amor, cuídelo, y la salud y el dinero, no la tire. ¡Hay veces que palabras sencillas como la letra de una canción son profundas reflexiones atribuibles a un profundo pensador o filósofo!.

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