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Si todos lo hacen...

Si todos lo hacen...

-Joaquín Sabina, Inmanol Arias, Almodóvar, Rodrigo Rato, Blesa, Bertín Osborne, José Manuel Soria? -Pa, ¿estás pasando lista a la clase de los listos?

-Casi. Estoy revisando la prensa reciente.

-¿Y esos nombres? ¿Qué tiene que ver Rodrigo Rato con Joaquín Sabina?

-Poco podría parecer. Pero resulta que los dos tienen en común que han constituido un entramado de sociedades, comunidades de bienes, uniones temporales?

-¿Y eso para qué?

-Sencillo. Para pagar pocos impuestos.

-¿Pocos?

-Los menos posibles.

-Pero llama la atención que en esa lista hay gente diestra, zurda y mediopensionista.

-Sí, hijo. Y si profundizamos un poco más nos encontramos más sorpresas: deportistas, como Messi, miembros de familias reales, como los Borbón, ministros y sus familias, empresarios, actores?

-Uffff?

-Sí, hijo. Se ha puesto de moda hacer como si vivieras fuera del país para no tener que pagar impuestos. Hay una familia muy conocida a la que han pillado en la trampita y le ha costado solo siete millones de euros.

-¿Qué está pasando en el país antes conocido como España?

-Es difícil de explicar. Pero en dos palabras: que nadie quiere pagar unos impuestos desmesurados.

-¿No son siempre desmesurados los impuestos, Pa?

-No, no siempre. Cuando la gente contribuye con un esfuerzo razonable no suele haber problemas. Casi todo el mundo -mira que digo casi- comprende que ha de colaborar a sostener los servicios públicos.

-Razonable.

-Pero cuando la presión fiscal alcanza valores asfixiantes se desata el «sálvese quien pueda».

-¿Algo así como «tonto el último»?

-Algo así, sí. Y nadie quiere pagar. Entonces comienza la picaresca. Y los españoles son los maestros de la galaxia en eso.

-Es cierto, no hemos encontrado en todo el Universo un pueblo con tanta imaginación.

-Es descomunal. Cuando la aplican al lado luminoso son unos fenómenos. Y si la usan en el lado oscuro no les ganan ni los beltegeusianos, que son los inventores de la estrella de la muerte.

-Pero entonces? ¿cómo se puede pagar todo lo que tienen si no es con impuestos?

-Veamos. Es evidente que los españoles han conseguido construir un Estado impensable hace unas pocas décadas. Educación, sanidad, pensiones, servicios sociales? ¡Me quito el sombrero!

-¿Entonces, Pa?

-Los políticos.

-¿Qué? ¿Otra vez?

-Sí hijo, sí. Los políticos han diseñado un Estado mastodóntico lleno de parasitismos. Entidades florero, como el Senado, o repetidas, como las diputaciones. Ocurrencias para colocar dinosaurios, como los consejos consultivos de las comunidades o los estatutos de los expresidentes. Miles y miles de empresas públicas sin razón de utilidad. Un entramado para colocar a los partidarios, a sus cuñados, amiguetes, colaboradores, primos segundos y a la tía María la sorda de asesora del concejal de fiestas.

-Ya. Y eso lo pagan los españolitos, ¿verdad?

-¡Verdad absoluta! Si el Estado comenzara por desmontarse y echar lastre por la borda, es decir, despedir inútiles y liquidar organismos parasitarios, los españoles comprenderían mejor que el destino de sus dineros es productivo y está justificado.

-Se me ocurre? ¿Qué tendrían que hacer los españoles para igualarse con el resto de Europa en términos de dirigentes políticos, asesores, coches oficiales y bicocas varias?

-Pues? espérate que voy a consultar el libro gordo de Dios, que tiene cinco billones de páginas, y hasta que no me lo digitalicen es incomodísimo? A ver? sí? aquí está? Para igualarse a la media europea civilizada los españoles deberían liquidar dos tercios de sus entidades, despedir al 70% de sus políticos, al 93% de los asesores, vender el 78% de los coches oficiales, y cerrar el Senado, las diputaciones, reducir al 40% los ayuntamientos y despedir a la tía María la sorda.

-Vaya. No parece difícil. Quizá así los impuestos se podrían reducir.

-Algo, sí. Se podría hacer?

-Y a los contribuyentes no se les quedaría cara de atropellados por una hormigonera cada vez que llega el treinta de junio. Si, digamos, se llegara a una presión fiscal sobre la tercera parte de los ingresos, ¡que ya está bien!, la gente pagaría con menos? rencor. Y no inventarían lo indecible para fundar sociedades donde tú diste las tres voces o simular que viven en Casadiosjistán.

-Lo malo de esto es que todos los que se llaman a sí mismo progresía nos van a poner a caer de un pegaso.

-Cierto. Pero lo más cu-Y no solo eso. Sino que llegado el periodo de liquidación, hacen la declaración de impuestos con el programa padre? de Messi.

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