Educación prohíbe el móvil en los colegios e institutos para atajar la adicción y el ciberacoso

Cerco al uso del teléfono móvil desde este próximo lunes. El uso del dispositivo electrónico estará prohibido por norma, tanto en colegios, como en institutos, incluido en los patios. Su uso quedará limitado a dos excepciones: las actividades didácticas bajo la supervisión del personal docente y razones individuales específicas de salud u otras debidamente justificadas que deberá autorizar la dirección del centro.

La Conselleria de Educación ha decidido poner freno en las aulas a la adicción que generan los smartphone entre el alumnado, así como otros preocupantes problemas en alza como es el acoso y ciberacoso o la disminución del rendimiento escolar con una orden para todos los centros educativos de la Comunidad Valenciana. Aunque la medida ya estaba extendida en buena parte de los colegios e institutos, en algunos de ellos incluso desde hace más de un lustro, el departamento de José Antonio Rovira ha querido generalizarla con tal de atajar una de las mayores preocupaciones de las familias hoy día, el enganche de sus hijos al móvil y su repercusión negativa en las notas y también en las relaciones sociales.

 De ahí que la comunidad educativa de la provincia de Alicante haya aplaudido la decisión autonómica, todo un reto que, sin embargo, no es sencillo de hacerlo cumplir a rajatabla por las dificultades para controlar al alumnado.

Así, la resolución que se publicará este viernes en el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana tiene por objeto regular el uso de dispositivos móviles en los centros educativos durante la jornada escolar (horario lectivo, tiempo de recreo y periodos dedicados al desarrollo de actividades complementarias y extraescolares), respetando su autonomía y las normas de igualdad y convivencia establecidas en la organización y funcionamiento del centro educativo. El ámbito de aplicación de esta orden son los centros educativos de enseñanzas no universitarias sostenidos con fondos públicos de la Comunidad Valenciana. A su vez, los colegios e institutos privados podrán acogerse a lo regulado en esta resolución.

Ante posibles incumplimientos será cada centro quien establezca, dentro de sus normas de organización y funcionamiento, el procedimiento de retirada, custodia temporal y devolución de los dispositivos. La resolución subraya que antes de su retirada, el personal docente debe de asegurarse de que el alumno lo apague como garantía de confidencialidad. 

Tensión en los institutos de Alicante por el uso de los móviles en clase

En centros de la provincia donde ya se aplica esta medida desde hace años apuestan por carnés de puntos que cuando se pierden por incumplir la prohibición se produce el requisamiento del móvil, también se penaliza al estudiante que con horas extra para realizar trabajo escolar o con la expulsión, en los extremos más graves. Hay diversas iniciativas en marcha.

El conseller señaló que la resolución «refuerza el papel de los docentes y su autoridad en las aulas», y manifestó que la toma de decisiones «debe estar basada en los principios de necesidad, proporcionalidad y eficiencia». Rovira destacó la importancia de «promover una educación digital responsable entre los niños y jóvenes y, en este sentido, manifestó que «ello implica establecer restricciones de tiempo, finalidad y lugar de uso, tanto dentro como fuera de los entornos educativos, y esta responsabilidad recae en todos los miembros de la comunidad educativa».

Apoyo unánime

Especialmente, para los institutos esta medida es absolutamente necesaria y así lo demuestra que la mayoría de centros se haya anticipado a la orden autonómica en los últimos años. «Es algo muy positivo no solo para que los móviles no perjudiquen el rendimiento académico, sino para crear hábitos de relaciones sociales. Estamos viendo que las generaciones de ahora son más introvertidas porque están encerradas en el mundo virtual», afirmó el presidente de los directores de Secundaria, Toni González, quien valoró positivamente que se puedan seguir permitiendo los teléfonos exclusivamente de un modo pedagógico. Si bien, el portavoz de los institutos reconoció que a lo largo del curso los centros tienen que hacer mucho hincapié al alumnado para que no se olvide de que el móvil está vetado.

Del mismo modo se pronunciaron ayer en los colegios, donde el problema de la adicción a estos dispositivos es mucho menor que en Secundaria simplemente por cuestión de edad. 

«No hay ningún centro que permita hoy día la entrada de escolares con móvil, los que vienen, que suelen ser los de cuarto o quinto de Primaria, lo primero que hacen es dejarlos en una caja apagados y los recogen cuando acaban las clases», indicó Isabel Moreno, presidenta de los directores de Infantil y Primaria, quien advirtió, eso sí, de que a estas edades tan tempranas el mayor problema se encuentra en el abuso del móvil en casa.

Desde el punto de vista de las familias, la Federación de Asociaciones de Padres y Madres (APAS) Gabriel Miró, se mostró muy de acuerdo con la medida de la Generalitat, pero con un matiz importante. «No compartimos que se deje usar el móvil para actividades concretas porque crearía discriminación entre el alumnado al que su familia no le permita tener un móvil», aseguró su secretaria Tonia Terrero.

Completamente a favor de la regulación de los dispositivos electrónicos en las aulas se mostró la FAPA Enric Valor «porque dan más problemas que soluciones», indicó su portavoz, Juanma Segura.

Datos alarmantes

La resolución autonómica fue presentada este jueves en València coincidiendo con la celebración del Día Mundial contra el acoso escolar. «En los últimos años se ha detectado un uso indiscriminado de la tecnología que, sin supervisión de un adulto, puede desarrollar ciertos comportamientos repetitivos y disruptivos en el ámbito educativo y social, provocando dificultades en el proceso de aprendizaje y en la gestión de la convivencia en los centros educativos», señaló la directora general de Innovación e Inclusión Educativa, Xaro Escrig.

Una encuesta realizada a más de 1.765 centros públicos, concertados y privados de la Comunidad revela que en 3º de Primaria el 8 % del alumnado afirma pasar más de tres horas al día usando el móvil; en 6º de Primaria un 18 %; en 4º de ESO un 23 %, en 2º de FP Básica un 35 % y en 2º de Bachillerato un 18 %.  

Además, según los datos del registro Itaca Previ de la Generalitat hay una mayor proporción de casos de ciberacoso detectado por los equipos directivos de los centros. Desde 2019 se han duplicado las notificaciones por uso inapropiado del móvil (145 a 270) y los casos de ciberacoso han aumentado en casi el 50 %, alertó la Conselleria de Educación.

«Los datos son alarmantes y preocupantes. Cuando se creó el plan autonómico decidimos volcarnos absolutamente en la educación, que es el primer eslabón para prevenir y promover un estilo de vida saludable», alertó Bartolomé Pérez Gálvez, coordinador de la Oficina de Salud Mental de la Comunidad Valenciana.

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