Con los constantes atascos que sufría la circunvalación de Alicante en pleno «boom» económico todo el mundo pensaba que la nueva carretera de peaje tenía el éxito asegurado cuando se inauguró en diciembre de 2007. No fue así y Ciralsa sólo alcanzó los 15.000 usuarios diarios que preveía su plan de negocio en el verano de 2008. La llegada de la crisis ese mismo otoño truncó todos los planes. Desde entonces las cifras de tráfico se han ido reduciendo de forma constante año tras año hasta caer por debajo de los 5.000 vehículos diarios el pasado mes de mayo, según las cifras oficiales del Gobierno, apenas un tercio de lo esperado. d.n.