El Consejo de Ministros aprobó ayer el Programa de Estabilidad 2016-2019, que incluye una senda de reducción de la tasa de paro que lo sitúa en el 14% en 2019 y un nivel de ocupación, que rondará los 20 millones. En cuanto al crecimiento económico, la vicepresidenta deGobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, avanzó que tal y como se había adelantado, el PIB crecerá un 2,7% en 2016, un 2,4% el próximo año y se estabilizará en una tasa de avance del 2,5% los dos años siguientes.

Tras estas cifras, el consumo privado se moderará en los próximos años, pasando de un crecimiento del 3,2% este año, al 2,6% en 2017 y al 2,4% en 2018 y 2019. Por su parte, las inversiones crecerán un 5,6% en 2016, para hacerlo ligeramente por debajo del 5% en los tres años siguientes. En el caso de la inversión en construcción, la progresión será de menos a más, pasando del 4,5% al 4,8% entre 2016 y 2019.

Reducción del desempleo

Según el Gobierno, la nueva senda de reducción del desempleo, prevé una tasa del 19,9% en 2016, del 17,9% en 2017, del 15,8% en 2018 y del 14% en 2019 en términos de Contabilidad Nacional. Esta reducción equivale a una rebaja de alrededor de 1,8 millones de parados en estos cuatro años y la recuperación de los niveles de ocupación de antes de la crisis, hasta los 20 millones de ocupados, en términos de Encuesta de Población Activa (EPA). También en estos términos, el Gobierno prevé un tasa de paro del 18,7% en 2016, que descenderá hasta el 13% en 2019.

Este porcentaje se situó al cierre del primer trimestre en el 21%, según la última EPA. Se trata de una de las principales novedades que aún no se conocían del cuadro macroeconómico que el Gobierno remitirá a Bruselas para su evaluación, junto al Plan Nacional de Reformas, que también se aprobó ayer.

La vicepresidenta destacó que si se sigue aplicando la misma política económica que hasta ahora, España puede acabar «con 20 millones de empleos en 2019 y una tasa de paro del entorno del 13%».

Por su parte, el ministro de Economía y Competitividad en funciones, Luis de Guindos, indicó que estas previsiones son «prudentes y cautas» para que tengan «muchísima credibilidad», y añadió que si este cuadro macroeconómico se cumple, España habrá recuperado a finales de este año o principios del próximo, los niveles de renta y de PIB anteriores a la crisis económica, siete años después.