La cadena de clínicas oftalmológicas Vissum parece tener garantizada su continuidad después de que hasta tres inversores distintos hayan presentado ofertas en firme por el grupo alicantino dentro del plazo fijado por el administrador concursal, que finalizaba en la medianoche del pasado lunes. De esta forma, ahora será el titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Alicante, que tutela todo el proceso, quien tendrá que decidir el comprador final en la licitación que se celebrará el próximo 27 de mayo, según confirmaron fuentes oficiales del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Aunque fueron ocho los posibles candidatos que llegaron a examinar las cuentas de la cadena creada por el doctor Jorge Alió, tal y como informó este diario el pasado 9 de abril, finalmente los que se han decidido a dar el paso adelante y pujar por la compañía son el escocés Optical Express, la cadena líder en cirugía láser ocular del Reino Unido; el fondo de inversión radicado en Barcelona Atalanta Gestión; y el madrileño Grupo Arpada, propietario de los centro geriátricos Valdeluz y que ha pujado a través de su filial inmobiliaria Urtinsa.
Los dos primeros garantizan en sus propuestas el mantenimiento del 100% de la plantilla de Vissum -unos 200 trabajadores- durante los próximos dos años, mientras que el último garantiza el 90% de los puestos de trabajo, ya que cerraría las clínicas de Getafe y de Canarias, según las mismas fuentes. Lo que no ha trascendido es la oferta económica aunque, con carácter general, todas ellas serían suficientes para cubrir los créditos contra la masa -los que se han generado después de la declaración del concurso de acreedores- y las deudas privilegiadas con carácter especial -las que tienen garantía hipotecaria-, mientras que el resto quedaría en el aire. No obstante, cada oferta es distinta -alguna, por ejemplo, ofrece la posibilidad de subrogar algún préstamo- por lo que el administrador concursal todavía debe cuantificarlas y emitir un informe para que el juez decida.
La cadena llegó a acumular una deuda superior a los 30 millones de euros como consecuencia de los planes de expansión que acometió antes de la crisis económica y que le llevaron a contar con 24 centros en toda España, de los que siguen operativos 17.
Ante la imposibilidad de hacer frente a los vencimientos, los propietarios de Vissum -el doctor Alió y Bankia- trataron de encontrar un nuevo socio dispuesto a invertir pero no lo lograrlo y optaron por acogerse a lo que antiguamente se conocía como suspensión de pagos. El proceso se resolverá a final del próximo mes.
