Los destinos turísticos como ejemplo de digitalización y de apuesta por la innovación y la tecnología. Esta fue una de las conclusiones del webinar «La transformación digital de las ciudades y el turismo» organizado por HIDRAQUA, INFORMACIÓN y LEVANTE que reunió ayer a un elenco de expertos que coincidieron en destacar que las ciudades más turísticas han demostrado ser las que están mejor preparadas para afrontar la pandemia debido a su inversión histórica en innovación, tecnología y digitalización.

La necesidad de gestionar los recursos hídricos ante una población flotante y estacional, garantizando en todo momento el suministro de agua, o la apuesta por la creación de soluciones innovadoras para monitorizar a los turistas que llegan generando conocimiento con el que fidelizar a los turistas a su localidad son algunos de las peculiaridades que hacen que estos municipios vayan un paso por delante del resto de ciudades en cuando a digitalización

Y en el campo de las ciudades turísticas la gestión del agua juega un papel clave, sobre todo en una zona como la del Mediterráneo caracterizada por las limitaciones hídricas. Al respecto, Jordi Azorín, director general de Hidraqua, señaló durante la presentación del encuentro que cuando se habla de turismo y agua «la gente suele pensar en piscinas» y son pocos los que piensan en el reto que supone «abastecer de agua todos los días del año, independientemente de la población que resida en un momento determinado».

Por ello, destacó el papel que juega la tecnología a la hora de garantizar un suministro de agua de calidad y que se consigue gracias a la inversión en innovación e infraestructuras modernas que permiten trabajar en tiempo real, reducir las averías y detectar las fugas lo antes posible. Para hacerlo realidad, apuntó, «en SUEZ, grupo empresarial al que pertenece Hidraqua, contamos con la red de hubs digitales Dinapsis –un total de seis centros repartidos por el territorio nacional—cuya misión es desarrollar tecnología de vanguardia para construir ciudades más inteligentes, resilientes y verdes».

En este sentido, tanto el alcalde de Cullera como el de Benidorm pusieron sus municipios como ejemplo de colaboración público-privada (la gestión del agua depende de Hidraqua) y de apuesta por la innovación. En Cullera se ha reducido su consumo de agua en un 40% desde 1992 gracias a la digitalización y con una afluencia turística que se ha incrementado, mientras que en Benidorm el consumo hídrico ha caído un 20% en 20 años a pesar de que la población se ha duplicado y los turistas se han triplicado.

El encuentro se celebró de forma online el 22 de marzo de 2021, Día Mundial del Agua.

Destinos inteligentes

Con respecto a la digitalización del municipio de Benidorm, su alcalde, Toni Pérez, enfatizó que los trabajos de inversión realizados años atrás para convertirlo en un destino inteligente apostando por la innovación y la tecnología sentaron muchas de las bases que han permitido actuar al ayuntamiento con celeridad en la gestión de esta crisis y en la comunicación de la administración local con los ciudadanos y con las empresas.

«Gracias a la digitalización agilizamos la administración, la hacemos más transparente, más eficiente, más democrática y más rentable», indicó, a la vez que señaló que con la sede electrónica el Ayuntamiento de Benidorm es capaz de hacer más de 131 trámites administrativos distintos y «ha posibilitado más de 230.000 operaciones de gestión municipal durante 2020, con más de 17.700 expedientes de ayudas Covid» en lo que consideró «un salto de calidad hacia una administración más rentable y con un plus de seguridad».

En esta misma línea, el alcalde de Cullera, Jordi Mayor, consideró que «a la vista de los datos y el nivel de interacción que hemos tenido los ayuntamientos turísticos con empresarios y ciudadanos en la gestión de esta crisis, podemos decir que los municipios turísticos como el de Cullera somos los que más trámites hemos realizado porque estábamos haciendo los deberes al apostar mucho tiempo antes por la digitalización y por las nuevas tecnologías», a la vez que aseguró que «nuestros municipios están mejor preparados para un mundo pandémico».

El reto de la gestión

Coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Agua, el resto de participantes en el webinar también pusieron el acento en la importancia que tiene la digitalización de las ciudades a la hora de crear un entorno sostenible. Al respecto, Tonia Salinas, directora del Parque Científico UMH, opinó que «las ciudades digitalizadas favorecen que los ciudadanos y visitantes tengan una mejor calidad de vida», aportando también mejores soluciones desde el punto de vista económico, social y medioambiental. 

«La mejor gestión de los recursos permite consumir menos agua, menos energía y, por tanto, reducir las emisiones de CO2, generando ciudades más agradables tanto para vivir como para ser visitadas», recalcó. Asimismo, coincidió con el resto de participantes al indicar que la apuesta e inversión de los destinos turísticos para analizar datos con los que lograr la fidelización de visitantes o atender a una población flotante «les ha hecho estar mejor preparadas, ofrecer trámites más rápidos en sus ayuntamientos y tener más capacidad para salir de la pandemia de una forma más rápida».

Para Laura Olcina, directora gerente del Instituto Tecnológico de Informática UPV, «hay que usar la tecnología como palanca de crecimiento». Por ello, consideró que «la aplicación de las tecnologías a una ciudad son infinitas y hablar de ciudades inteligentes es hablar de ciudades sostenibles». En cuanto a los retos de futuro, la experta aseguró que hay que apostar por la información y por los datos porque «nos va a permitir tomar decisiones inteligentes y en las ciudades, por ejemplo, nos va a posibilitar hacer una gestión integral como pasa con el agua».

Participantes del evento celebrado el día 22 de manera virtual

Siguiendo con los retos, Enrique Bigné, catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universitat de València y director de la Unidad de Investigación Digital Marketing, incidió en que hay que «poner en valor la dimensión innovadora del turismo» al recordar que «la digitalización está hoy en prácticamente casi todos los sectores pero el turismo fue el primero en implementarla». Además, apuntó que la tecnología tiene dos beneficios fundamentales cuando se aplica: la obtención de datos para hacer un uso más responsable y eficiente de los recursos y la posibilidad que ofrecen de predecir futuros escenarios gracias a las técnicas de machine learning.

Nuria Montes, directora general de Hosbec, defendió la necesidad de seguir invirtiendo en el sector turístico en innovación y digitalización, por lo que defendió que los fondos europeos para la reconstrucción lleguen a las empresas. Sobre el impacto que la tecnología tiene en el trabajo dentro del sector, la representante de los hoteleros opinó que «no destruirá empleos porque es una oportunidad para que nuestros trabajos sean más especializados y eliminar tareas mecánicas», recalcando al mismo tiempo que en el turismo «el componente humano va a seguir siendo esencial».

Adaptación al cambio climático

Jorge Olcina, catedrático de Análisis Geográfico Regional de la UA, centró su intervención en la necesidad de adaptar las ciudades al cambio climático, lo que consideró «uno de los grandes retos del país». Según explicó, la reducción progresiva de precipitaciones en el Mediterráneo, que irá unida a un incremento de los fenómenos meteorológicos extremos, sobre todo en zonas costeras, «hace necesario tener infraestructuras con las que poder aprovechar el agua como pueden ser los parques inundables, como el del Parque La Marjal, y garantizar el abastecimiento en cantidad y calidad. Lo privado y público deben trabajar conjuntamente para afrontar los retos de sostenibilidad, gestión territorial y adaptación territorial», apuntó.

Para terminar, Antonio Sánchez, responsable de Innovación Dinapsis, explicó el trabajo que hacen desde la red de hubs de Dinapsis para crear soluciones para la gestión territorial sostenible y enumeró algunas de las iniciativas llevadas a cabo como la app desarrollada para vigilar el aforo en las playas, el seguimiento del Covid-19 en las poblaciones mediante el rastreo en las aguas residuales (City Sentinel) o la una herramienta que permitirá analizar la evolución económica de la ciudad a través del consumo del agua.