La economía de la provincia no acaba de ver la luz al final del túnel. Así lo pone en evidencia el último informe emitido por la Cámara de Alicante y Banco Sabadell, del que se desprende que el Producto Interior Bruto (PIB) continúa un 23,9% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia. El agravamiento de la crisis sanitaria y el endurecimiento de las medidas de contención para frenar la tercera ola provocaron un nuevo descenso de la actividad en el primer trimestre del año.
El Indicador Sintético de la Actividad Económica de la Provincia de Alicante (Ispa) destaca que el PIB generado por la economía alicantina registró una variación interanual del -17,3% en el primer trimestre de 2021, frente al -20,4% del trimestre anterior. Pese a ello, la comparación con el ultimo trimestre de 2019 viene a poner de manifiesto que todavía queda un largo camino por recorrer para alcanzar los niveles precrisis.
La recuperación de la industria y la construcción no logra compensar el desplome del sector servicios
Según el informe, la recuperación de la actividad iniciada en el tercer trimestre del pasado año solo ha permitido corregir una parte de la intensa contracción que tuvo lugar en la primera mitad del ejercicio. El debilitamiento de la actividad fue más intenso en los dos primeros meses de 2021. La relajación de las restricciones a partir de ahí, debido a la mejora de la situación epidemiológica en marzo, repercutió de forma positiva, impidiendo que el impacto en el PIB fuera mayor.
Los efectos de la pandemia están siendo muy desiguales entre sectores, empresas y colectivos de trabajadores. La crisis incide de forma más negativa en algunas actividades de servicios que requieren de un alto grado de interacción social, como el comercio, la hostelería, el transporte y las actividades artísticas y recreativas.
La actividad en el sector servicios volvió a caer en el primer trimestre, situándose un 21,9% por debajo del registro del primer trimestre de 2020. El Valor Añadido Bruto (VAB) de las ramas del comercio, transporte y hostelería retrocedió un 52,3%, como consecuencia de las restricciones impuestas en los últimos meses del pasado año y comienzos de 2021 para contener la pandemia. El desplome de la actividad durante cinco trimestres consecutivos ha situado el VAB generado por estas ramas un 61% por debajo de su nivel precrisis.
Sin embargo, añade el estudio, el VAB de la industria se está recuperando con más rapidez que el PIB de la provincia, debido al mayor impacto negativo sobre los sectores relacionados con el ocio y el turismo. La actividad de la industria manufacturera sigue una trayectoria de recuperación desde la segunda mitad del pasado año, que ha continuado en los primeros meses de 2021. El VAB de las ramas industriales registra un crecimiento interanual del 0,6% y recorta la distancia respecto al nivel de actividad previo a la pandemia. En la actualidad sólo se encuentra un 1,7% por debajo.
En lo que respecta a la construcción, fue ganando pulso en la segunda mitad de 2020, a medida que se reanudaban las obras y la ejecución de proyectos en curso. Ese mayor ritmo permitió que en el cuarto trimestre el VAB generado por el sector superara en un 0,9% el nivel prepandemia.
La actividad del sector primario, por último, sigue avanzando a buen ritmo y en el primer trimestre de 2021 el VAB registró un crecimiento interanual del 3%.
