Las hipotecas se desploman en la provincia un 24 % arrastradas por la subida de tipos

Los préstamos para viviendas se situaron en septiembre en 1.520, en un contexto en el que los intereses repuntaron un punto interanual. Promotores y expertos vinculan este descenso con una normalización del mercado tras un 2022 excepcional

Una entidad bancaria publicitando hipotecas.

Una entidad bancaria publicitando hipotecas.

M. Vilaplana

M. Vilaplana

La subida de los intereses está teniendo un fuerte impacto sobre el sector inmobiliario en la provincia de Alicante. Así se pone en evidencia en las hipotecas formalizadas para la compra de viviendas, que en septiembre se situaron en 1.520, lo que supone un retroceso del 24% con relación al mismo mes del ejercicio anterior. Todo en un contexto en el que los tipos se elevaron más de un punto también en términos interanuales, hasta alcanzar el 3,26%. Pese al notable desplome de los préstamos, tanto los promotores como los expertos en la materia tratan de lanzar un mensaje de tranquilidad, toda vez que vinculan este descenso con el proceso de normalización que se está registrando en los mercados después de un 2022 que no dudan en calificar de excepcional.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) hizo públicos este martes los últimos datos correspondientes al número de hipotecas inscritas en los registros de la propiedad. Y la dinámica que se registra a nivel general es negativa, como así lo demuestra el hecho de que, en el conjunto de España, se formalizaron un total de 31.054 préstamos, lo que representa un descenso del 29,6% en tasa anual.

El retroceso ha sido menor en la provincia de Alicante, gracias, en parte, al importante papel que desempeña en este territorio la fuerte demanda extranjera. Aún así, la caída ha sido más que evidente en comparación con el mes de septiembre del año pasado, y también si se confronta en términos trimestrales. Y es que en el periodo comprendido entre julio y septiembre de este año, el número de hipotecas ha sido de 3.947, frente a las 5.156 del mismo periodo anterior. Un desplome, en definitiva, del 24%.

El único elemento positivo hay que buscarlo en la comparativa con agosto, cuando las hipotecas formalizadas se situaron en 1.081, por lo que la situación ha registrado una mejoría a nivel mensual, aunque agosto suele ser mes de vacaciones.

El mayor contraste con relación a los datos a nivel nacional es el que corresponde al importe medio de las hipotecas. Y es que mientras en el conjunto de España se ha mantenido prácticamente en plano, con 143.186 euros, en el caso de la provincia ha habido un repunte de poco más del 15%, hasta alcanzar los 112.908 euros.

¿Y qué es lo que opina el sector acerca de lo que está sucediendo? Lejos de lo que cabría esperar, desde la Asociación de Promotores Inmobiliarios de la Provincia de Alicante (Provia) se lanza un mensaje de tranquilidad. El secretario general de la organización, Jesualdo Ros, explica que el descenso en el número de hipotecas hay que atribuirlo a que las ventas de viviendas están regresando a los ritmos que se consideraban normales, después de un año 2022 en el que, afirma, «la actividad estuvo desbocada».

De hecho, las 1.999 hipotecas que se formalizaron en el mes de septiembre del año pasado fue la cifra más elevada desde 2010, algo que se atribuye a la demanda que había embalsada como consecuencia de la pandemia, y también a los indicios en aquellos momentos con relación a que los tipos de interés iban a experimentar, como así se ha confirmado, unos notables incrementos.

Ros, por otro lado, destaca que el descenso se centra, principalmente, en las hipotecas para vivienda usada, toda vez que, según los datos que maneja la asociación, solo el 16% de los compradores de vivienda de nueva construcción en la provincia recurren a los préstamos, algo que tiene mucho que ver con el turismo residencial, copado por los clientes extranjeros.

En parecidos términos se expresa Laura Martínez, portavoz del comparador y asesor hipotecario iAhorro, quien coincide con Jesualdo Ros en que «2022 fue un año excepcional para el mercado inmobiliario y ahora estamos en una fase de estabilización». Por ello, añade, «no podemos hablar de crisis, sino de equilibrio de los diferentes valores del mercado, que poco a poco se están ajustando en un contexto de tipos altos y de precios de viviendas que no terminan de bajar». Con relación al comportamiento de los intereses, Martínez opina que se van a mantener en el inicio del próximo año, y que será a partir de la segunda mitad del ejercicio cuando empezarán a bajar.

Fuentes de entidades financieras, por último, explican que, pese a que va a haber fluctuaciones, no es previsible que en los próximos meses se registren repuntes reseñables en la concesión de hipotecas, teniendo en cuenta que el Banco Central Europeo (BCE) mantiene el Euribor al 4%.