El presidente de KPMG España apela por la formación de las empresas en IA: "su mal uso puede ser horrible"

Inteligencia Artificial (IA), colaboración con el sistema educativo, aumentar el tamaño del tejido empresarial, sostenibilidad y rentabilidad. Son los principales retos a los se enfrentan las empresas españolas y especialmente las de la provincia de Alicante según Juanjo Cano, presidente de KPMG España, una de las firmas más importantes del mundo que presta servicios de consultoría y asesoría empresarial.

El gurú en la materia y directivo de una multinacional que trabaja con más de 6.000 personas ha dibujado un panorama optimista, pero cargado de desafíos, en una de las Conferencias Circulares del Cámara Business Club, celebrada este martes en el complejo turístico Alannia Costa Blanca, en Crevillent. Una cita presentada por el vicepresidente de la Cámara de Comercio y dueño de Carmencita, Jesús Navarro, así como el presidente de la entidad, Carlos Baño.

La irrupción de la IA generativa en el mundo empresarial ha protagonizado su intervención, así como las principales preocupaciones de los empresarios que han asistido al acto por el ritmo vertiginoso al que avanza la aplicación de la Inteligencia Artificial en cualquier negocio y principalmente por el temor a que esta tecnología acabe sustituyendo a los trabajadores.

"Todo apunta a que será una auténtica revolución, sin que los propios expertos sepamos cuál va a ser su alcance", ha dicho Cano, quien ha apelado a la necesidad de formarse y sobre todo tener en cuenta las líneas rojas de esta herramienta.

En primer lugar, ha puesto el acento en cuidar la ética y moral "porque un mal uso puede ser horrible, los algoritmos se pueden utilizar con sesgos y de forma errónea", ha señalado.

Extremar la seguridad ha sido la segunda clave que ha señalado y la tercera, las personas. "La IA tiene que ser para ayudar a las personas y no para quitarlas", ha apuntado. Pese a su eclosión en los puestos de trabajo, el directivo de una multinacional, que ya tiene solo a 100 personas dedicadas a la Inteligencia Artificial, ha reconocido que "a priori es que lo que se puede empezar a sustituir son los perfiles más bajos y las tareas más rutinarias, pero me cuesta ver que una máquina vaya a gestionar las decisiones de nuestras empresas".

Formación y optimismo

La formación en IA es solo una de las necesidades que tienen por delante los empresarios, en un contexto en el que el líder de una "Big Four" ha destacado también la importancia del talento, de identificar y de dar soluciones en la brecha que tienen las empresas en cuanto al mundo digital "mientras vemos cómo falla la actitud de las personas", ha dicho.

En este sentido, Cano ha afirmado que realidad es que "los empresarios trabajamos para crecer y al crecer contratamos gente y generamos empleo, pero tiene que haber un mayor apoyo para dejarnos hacer". Por ello, ha abogado por" transmitir una visión más optimista, porque estamos todo el día viviendo en conflicto continuo. Tenemos un país, un empresariado de primer nivel y una sociedad preparada". De hecho, ha admitido que a nivel internacional la visión que se tiene de España y de las empresas del país es mucho mejor de la que se tiene dentro. "Nos ven mucho mejor de lo que nos vemos nosotros, somos autocríticos por naturaleza y nos tienen muy bien considerados, lo vemos día a día con los inversores. Hay muchos fondos que tienen interés en España. Ahora mismo tenemos mayor volumen de actividad que nunca", ha explicado.

Con todo ello, Juanjo Cano ha abogado por que el sistema educativo trabaje el talento. Para ello, ha defendido una mayor apuesta de las instituciones por colaborar con las empresas "desde el origen" y "desde edades tempranas" con el sistema educativo, no solo en la Formación Profesional, ni en la universidad, sino en los colegios. "Seamos del color que seamos es necesario abordar esto", ha reclamado.

Crecimiento

Dentro de este contexto, el presidente de KPMG España ha admitido que las empresas tienen que crecer todo el país y ser de mayor tamaño. "Alicante tiene muy bien tejido empresarial pero debería de ser cada vez más grande", ha admitido, además de señalar que la sostenibilidad y ser competitivos tienen que estar en equilibrio. "La sostenibilidad es sumamente importante, nadie la discute y no hay empresa que carezca de ese aspecto en su plan estratégico. Si antes de la invasión rusa todo lo que se hablaba era de la transición energética y de la descarbonización, pero con la guerra han quedado patente las diferencias en regulación. Hay que marcar los tiempos de acompasar el desarrollo y que sea rentable", ha destacado.

 También ha evidenciado la necesidad de apostar por una mayor "colaboración publico privada para canalizar los fondos europeos, una oportunidad muy importante para el país con tal de ser más competitivos".