Efectos del cambio climático

Freixenet plantea un ERTE sobre más de 600 personas por la sequía

La medida, que afectaría a un 80% de la plantilla, tiene que ser ahora negociada con los trabajadores y aceptada por la Generalitat

Freixenet anuncia un ERTE que afectará a 615 trabajadores

Vídeo: Agencia ATLAS | Foto: EFE

Redacción

Lo advirtió hace menos de una semana el vicepresidente del grupo Henkell FreixenetPedro Ferrer: la sequía les hacía afrontar 2024 con cierta preocupación por la elevadísima posibilidad de no poder producir suficientes botellas de cava para satisfacer adecuadamente la demanda. Ahora, esta preocupación se ha convertido en plan de contingencia. La compañía ha presentado al departament d'Empresa i Treball de la Generalitat de Catalunya un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afectaría a 615 trabajadores, es decir, al 80% de los 778 que conforman la plantilla en su totalidad.

Según lo que apunta la productora de vino espumoso en un comunicado, la propuesta afecta a los empleados de Freixenet S.A. y de Segura Viudas S.A.U., (es decir, que no implica a la plantilla de Comercial Grup Freixenet, la tercera sociedad catalana del conglomerado y la que lleva la actividad comercial del grupo) y tiene ahora que negociarse con la representación de los trabajadores y ser aceptada por la Generalitat. De tirar hacia adelante como la tiene contemplada esta compañía con cavas en Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona), el mecanismo se activará en mayo e irá modulando su intensidad en función del periodo del año y de cómo evolucione la situación de sequía.

El ERTE, un sistema que se popularizó a raíz de la crisis del covid y los consecuentes confinamientos, contempla tanto que la plantilla trabaje menos horas como que los trabajadores vean suspendido temporalmente su contrato.

Fuentes de Freixenet aseguran que todavía tienen que pulir los detalles de cómo van a gestionarlo en su caso, que dependerá de las distintas áreas y que están pendientes de hablar con los empleados. También que la intención es levantar el expediente tan pronto la situación se suavice y que en ningún caso se trata de la antesala a un expediente de regulación de empleo (ERE) convencional, lo que conllevaría el despido de los trabajadores.

"La medida, implementada como un ejercicio de responsabilidad, tiene como objeto garantizar la operatividad del negocio y preservar la empleabilidad para poder hacer frente a causas externas y de fuerza mayor provocadas por la grave sequía", sostiene la compañía en el comunicado. "El ERTE te imposibilita presentar luego un ERE", responden, más directamente, estas fuentes en privado. "La intención es proteger la empleabilidad de la empresa", insisten.

"El ERTE por fuerza mayor es una medida excepcional que se enmarca en el actual contexto de crisis provocada por la falta de materia prima derivada de la fuerte sequía que viene afectando al sector desde el 2021, con especial afectación en 2023 en la zona de El Penedés", abunda la empresa.

Caída de un 40% de la recolección

Los datos que maneja la Denominación de Origen (DO) Cava hablan de que durante la última cosecha se recolectó un 40% menos de materia prima que en 2021, un porcentaje casi diez puntos peor al que se registra para el conjunto de España. De hecho, desde Freixenet aseguran que de la zona del Penedès en concreto salió un 45% menos de uva que entonces. "Estamos trabajando en lo que podemos para paliar en lo posible los efectos climatológicos y paliar la carestía de producto, porque si no entra, no podemos ofrecer", advertía hace unas semanas el presidente del consejo regulador del cavaJavier Pagés.

Que la compañía que aporta prácticamente la mitad de lo que factura el sector del cava tome una decisión de este calibre da buena cuenta de la dimensión del problema. "Viendo que la demanda mundial de cava está en auge y que no podemos producir suficientes botellas para satisfacerla adecuadamente a corto plazo, la situación es realmente complicada a todos los niveles", había advertido la semana pasada Freixenet, que, pese a formar parte de una multinacional alemana desde que se alió con Henkell en 2018, está igualmente atada a las normas del consejo regulador del cava, lo que la obliga a trabajar con determinadas cantidades de uva procedente de Cataluña. De este modo, ahora todo queda pendiente de que la plantilla y la Generalitat validen su propuesta.