Rubén Baraja, entrenador del Elche, ha confesado esta mañana que el partido del domingo ante la Ponferradina (19.15 horas) «me preocupa» y argumenta que todo lo que rodea al citado duelo ante el equipo berciano no le agrada. «No me gusta nada, ni el partido, segundo en casa, ni el horario, ni tampoco el rival, ni esa sensación de creer que todo va a ser fácil porque venimos de una buena dinámica», afirma antes de decir que «si hay algo que nos hemos demostrado en estos 21 partidos es que cualquier rival es complicado, respeto muchísimo a la Ponferradina, a pesar de que esté pasando una mala racha, porque tiene mucho talento y puede ganar en cualquier campo».

Baraja piensa que «para nosotros este partido es un reto, en un horario poco habitual y como último partido de la jornada, en el que se recogen todas las emociones del fin de semana». Entiende que su equipo «debe ser capaz de dar continuidad a lo que estamos haciendo, ante un buen rival. Hay que hacer muchas cosas bien para ganar».

El preparador castellano explica de forma metafórica que «a todos nos gusta subir en la ola, pero a veces te puede mojar e incluso ahogar. Hay que estar preparado para un partido difícil, como todos los de esta categoría».

El preparador franjiverde confirmó que «esta semana Cristaldo va a estar convocado». Desea que «se integre lo antes posible y nos pueda ir dando lo que esperamos de él. Es un jugador diferente, con unas características y rápido». Hoy no ha entrenado debido a una gastroenteritis Héctor, mientras que Cifu arrastra molestias en la rodilla, aunque ambos pueden estar el domingo en el grupo de los elegidos. Son bajas por lesión Hugo, José Ángel y Pol.