Manuel Rodríguez, Manu, tiene cada día más cerca el objetivo de ascender con el Elche, una hazaña que ya tuvo la suerte de saborear con el Lugo hace unas campañas. «Cuando me propusieron fichar por el Elche me pareció vivir un sueño, por todo lo que significa este club. Por eso vine y espero que podamos subir a Segunda», dice.

El gallego reconoció que el equipo está con una «alegría enorme» tras asegurar la promoción, pero indicó que el reto es ganar los dos partidos que quedan para «meter presión al Villarreal B. Quedan seis puntos y todo puede pasar en estas dos jornadas».

Insistió en la idea de que «la gente está enchufada y con las ideas claras», antes de afirmar que el relevo en el banquillo le ha venido bien al Elche. «Todo el mundo sabe lo que tiene en mano y estamos muy metidos. Además, tenemos a la afición por detrás empujando», explica el defensa.

Manu destacó como clave en una promoción «dejar la portería a cero» y ser sólidos en los partidos de casa, algo que el equipo ilicitano ha logrado en las últimas jornadas.

De todas formas, el futbolista franjiverde no quiso especular sobre la fase de ascenso y abogó por centrarse en el partido del domingo ante el Hércules (18 horas), al que espera que venga motivado para intentar lograr la clasificación para la Copa y resarcirse de sus malos resultados. «Nosotros vamos a lo nuestro, preparándolo a conciencia. Nuestra obligación es la de ganar, ganar y volver a ganar», recuerda antes de volver a pensar en el derbi: «Queremos darle una alegría a nuestra afición, pero también seguir la dinámica positiva que llevamos con el fin de llegar lo más fuertes posible al play-off».