El Getafe intentó ayer, por todos los medios, volver aplazar el encuentro frente al Elche. Su presidente, Ángel Torres, cargó duramente contra LaLiga y aseguró que obligarles a disputar hoy (19 horas) el partido era una barbaridad y podía alterar la competición. El máximo dirigente del conjunto azulón alegó que su equipo lleva desde el viernes sin poder entrenar por la tormenta «Filomena», que ha azotado especialmente al centro de España con un temporada de nieve; que sus futbolistas no podían salir de sus domicilios y que no estaba claro que este lunes pudieran salir vuelos desde la capital de España.

Sin embargo, la solicitud del Getafe cayó en saco roto y LaLiga, incluso le ayudó a buscar soluciones para desplazarse hasta tierras ilicitanas, una vez que durante la tarde de ayer ya comenzaron a restablecerse las comunicaciones, tanto desde el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas como por tren. Incluso desde la Patronal del fútbol mandaron vehículos a los domicilios de los jugadores para recogerlos y llevarlos a un hotel cercano a Barajas para que hoy puedan volar.

Más que tres puntos en juego

LaLiga entiende que la temporada ya está siendo complicada por la pandemia del covid, que se han tenido que aplazar partidos y que el calendario está muy comprimido. Además, en principio, no debe haber problema para que el vuelo que debe traer hoy a la expedición azulona.

Las excusas del Getafe tenían un doble trasfondo. Es cierto que este fin de semana hay problemas para los desplazamientos desde Madrid, pero el temporal comenzó a remitir ayer. El conjunto azulón aprovechó las circunstancias para poder ganar tiempo, ante un partido tan importante, y por ello quiso retrasar al miércoles o fijar en otra fecha más adelante el encuentro. De esa forma, Bordalás dispondría de más días para aclimatar a Aleñá y Kubo, sus dos últimos fichajes y preparar mejor el envite.

Pero LaLiga se mostró tajante porque no quiere más complicaciones en un calendario ya de por sí saturado y, además, entiende que la expedición del Getafe dispone de alternativas suficientes llegar a Elche. Si el tiempo empeora en las últimas horas, algo que no es previsible, ya sí que se estudiaría tomar otra decisión.

De esta forma, franjiverdes e ilicitanos afrontan un partido con algo más que tres puntos en juego. Ambos equipos están separados por solo uno en la clasificación y el que pierda se situará en puestos de descenso.

Peor racha de la temporada

Tanto el cuadro de Almirón como el de Bordalás están inmersos en su peor racha de la temporada. Los ilicitanos acumulan diez partidos sin ganar, que lo han situado en la zona roja; mientras que los madrileños solo han conseguido una victoria en los últimos once envites, con el agravante de la eliminación del pasado miércoles en la Copa del Rey a manos de Córdoba. Está mala dinámica también pone en peligro la continuidad de Bordalás en el banquillo en caso de derrota en el Martínez Valero.

Por los tanto, los dos equipos tienen la necesidad perentoria del triunfo y afrontarán el encuentro de esta tarde a cara de perro.

Almirón recupera al central Diego González, que se ha perdido los cuatro últimos partidos por una rotura fibrilar en la zona de los isquiotibiales; mientras que el franco-congoleño Nuke Mfulu reapareció el pasado miércoles en el choque copero frente a La Nucía y ya ha superado su esguince en la rodilla.

Por su parte, Pere Milla, que tampoco estuvo en el Camilo Cano por unas molestias con una uña de un pie, ya está recuperado y en disposición de jugar.

La única baja será la Tete Morente, que en la última jornada se lesionó en Bilbao. Sufre una rotura en la zona de los isquiotibiales y tardará dos o tres semanas más en estar en condiciones de jugar.

La plantilla del Elche realizó ayer su último entrenamiento en el campo Díez Iborra de la Ciudad Deportiva Juan Ángel Romero y el preparador franjiverde duda en si volver al sistema de tres centrales, que tan buen resultado le dio en el inicio de campeonato; o mantener la línea defensiva de cuatro jugadores que ha venido utilizando en los últimos encuentros.

Si regresa a los tres centrales, Barragán, Gonzalo Verdú y Josema ocuparán el eje de la zaga y Josan y Fidel los carriles como al inicio de Liga. Si mantiene los cuatro defensas, Barragán y Sánchez Miño serían los laterales, con Verdú y Josema con en centro de la defensa.

Lo que parece claro es que el técnico argentino mantendrá en el centro del campo a los tres futbolistas que tan buen resultado le dieron frente al Real Madrid: Iván Marcone, Raúl Guti y Víctor Rodríguez. Si juega con línea de cuatro atrás, Rigoni y Fidel se ubicarán en los extremos y la duda será quién acompañaría a Lucas Boyé en ataque: Pere Milla o Guido Carrillo, o, incluso, Nino. Si opta por los tres centrales, Fidel retrasará su posición y Rigoni formará el ataque junto a Boyé.

Damián y Ángel, titulares

En el Getafe, que llega al Martínez Valero con cuatro exfranjiverdes en sus filas: Damián Suárez, Xabi Etxeita, Chema Rodríguez y Ángel Rodríguez, además de Javier Vidal (preparador físico) y Patri Moreno (segundo entrenador) junto a Bordalás; dos de ellos estarán en el once inicial, Damián en el lateral derecho y Ángel en la punta del ataque.

Etxeita y Chema deberán esperar su oportunidad en el banquillo, junto a Aleña y Kubo, los dos flamantes últimos fichajes del cuadro azulón que tienen muchas papeletas de debutar en una convocatoria con su nuevo equipo.