Esta noche, a las 23.59 horas, finalizó el plazo de fichajes del mercado de invierno y el Elche continúa sin cerrar ninguna operación para reforzar el equipo. El máximo accionista, Christian Bragarnik, todavía no ha dado el visto bueno a ninguna de las operaciones que hay sobre la mesa y durante el día de hoy se espera una jornada intensa y maratoniana en la que habrá que correr.

Esta táctica no es nueva. El inversor argentino, que también es representante de futbolistas, ya la utilizó en los dos últimos mercados. En enero del año pasado y en verano, cuando firmó a varios futbolistas a última hora.

La temporada pasada traspasó el 31 de enero a Yacine Qasmi al Rayo Vallecano y, al mismo tiempo, cerró la incorporaciones de Víctor Rodríguez y de Jonathas.

El pasado 6 de octubre, con la campana a punto de anunciar el cierre, el club ilicitano también anunció los fichajes de Iván Marcone, Guido Carrillo, Rigoni y «Ruso» Rodríguez.

Bragarnik, que continúa en Argentina y no ha regresado desde que se marchó tras el encuentro de Valladolid, está tensando la cuerda al máximo. No se sabe si es por conseguir mejores precios y mejores oportunidades o porque no le satisface lo que le han ofrecido hasta el momento el mercado.

En principio es todo una incógnita los movimientos que se puedan producir, aunque en la entidad franjiverde confía en que haya varios. Va a ser difícil que lleguen los cinco o seis futbolistas que demandaba el técnico, Jorge Almirón. De momento, el único fichaje que se ha producido en el mercado de invierno ha sido el lateral izquierdo colombiano Johan Mojica.

Entradas y salidas

El Elche tiene las 25 fichas cubiertas, por lo que para poder llevar a cabo alguna incorporación se deben producir salidas.

Todo va a depender de las altas que se puedan producir. El primero en la lista para abandonar el club ilicitano es Youssouf Koné. El maliense no cuenta para Almirón y se ha quedado fuera de las convocatorias en los últimos partidos, incluso en la Copa del Rey. El lateral izquierdo está cedido por el Olympique de Lyon y hay que llegar a un acuerdo con el club francés. El problema radica en que el futbolista africano no está muy por la labor de marcharse y ha amenazado, incluso, con quedarse toda la temporada, aún sabiendo que no va a jugar. Su esperanza es que se produzca un cambio de entrenador que le pueda otorgar alguna oportunidad.

No obstante, en el Elche confían en que a lo largo del día de hoy se pueda alcanzar un acuerdo y encontrarle un nuevo destino, que podría estar en Francia, donde todavía goza de un buen cartel.

Otros candidatos a abandonar la entidad ilicitana son el argentino Sánchez Miño y el colombiano Jason Lucumí. Bragarnik y Almirón fueron los que los trajeron y, ahora, son los encargados de buscarle un equipo.

Luismi y Nuke Mfulu

También se encuentran en la rampa de salida los mediocentros Luismi Sánchez y Nuke Mfulu. Una señala clara de su posible salida fue su ausencia en la convocatoria para el partido del pasado sábado frente al Valencia. Ambos se quedaron fuera por decisión técnica y no tenían ningún tipo de problema física. Almirón optó por llevarse antes al canterano Jony Álamo.

Luismi cuenta con un buen cartel en la Segunda División y varios equipos, entre ellos el Zaragoza, ya se han interesado por sus servicios. Mientras que Mfulu también es conocido en el fútbol francés.

Dani Calvo y Cifu eran otros de los futbolistas que tenían el cartel para poder salir en caso de la llegada de un central y de un lateral derecho.

En estos momentos no se descarta nada, ni a la hora de entrar ni de salir. La comisión deportiva estuvo ayer durante todo el día en las oficinas del Martínez Valero intentando gestionar diferentes alternativas a la espera de que Bragarnik decida apretar el botón y dar el visto bueno. El máximo accionista también maneja varias opciones. El día va a ser largo y el reloj avanza de forma inexorable.

La afición estalla contra Almirón y el dueño del club

Numerosas peñas emiten comunicados pidiendo la destitución del entrenador y la llegada de refuerzos

La afición del Elche ya ha perdido la paciencia y ha estallado tras la mala racha de su equipo. Los seguidores franjiverdes son un clamor y de manera, prácticamente, unánime solicitan la destitución del entrenador Jorge Almirón y le piden al dueño del club, Christian Bragarnik, que dé la cara y que lleve a cabo un relevo en el banquillo y traiga refuerzos para evitar que el equipo se hunda todavía más y pueda luchar por la permanencia en Primera. Nada más finalizar el partido frente al Valencia, los aficionados, a través de las redes sociales, comenzaron a mostrar en cascada su malestar y profunda preocupación por la mala trayectoria del equipo. Al mismo tiempo, solicitaron al inversor argentino, que sigue en su país, que tome decisiones drásticas, realice un cambio de entrenador y acometa fichajes para reforzar la plantilla. El hasthtag #AlmironOut se convirtió en trending topic en Twitter, a la vez que se han ido multiplicando los comunicados de las diferentes peñas del Elche. Sentimiento Franjiverde, Els Gafarrons, Franjiverdes Vega Baja, Penya Altabix, Nino Leyenda, Pelucas Verdes, Franja Verde, Ifema, Furia Elche, Franjiverdes Petrer y Rabuts Novelda o Portus Ilicitanus publicaron en Twitter y Facebook su solicitud para que se produzca la destitución de Almirón. Por su parte, Grada Fondo Sur 1923 pidió a los jugadores que defiendan el escudo y den todo por la camiseta franjiverde. A ello se unieron multitud de aficionados a nivel particular que también solicitaron el cambio de entrenador para frenar la caída libre del conjunto ilicitano. Todo esto, respaldado por la Federación de Peñas, se une al comunicado que la agrupación de peñistas emitió el pasado jueves recordando que si hubiera la posibilidad de acudir al estadio Martínez Valero en los partidos, tanto Almirón como Bragarnik ya se hubieran llevado una «sonora pitada». El nerviosismo es cada vez mayor al ver como el Elche se hunde como un barco a la deriva sin que nadie le ponga solución.