El entrenador del Elche, Jorge Almirón, volvió ayer a pedir «confianza» en el equipo y a destacar «la buena semana» de entrenamientos tras el empate conseguido contra el Villarreal. La situación sigue siendo inquietante, pero el técnico trató de ir paso a paso. «Primero vamos a hablar del Celta, el próximo rival. Después ya habrá tiempo para pensar en los siguientes», señaló, después de no contestar -no se sabe si por olvido o por no querer-, sobre si siente que esta jornada es un «match-ball» para él como entrenador del Elche.

Contra el Celta, ¿balón jugado o versión más directa con un 4+4+2? «Las dos versiones son buenas según las circunstancias de cada rival, de cada partido, de cada momento del partido», apuntaba Almirón. La posibilidad de jugar con dos puntas es «una opción que debemos aprovechar cuando se dé la situación adecuada, pero siempre dependerá del contexto del partido». El Celta «es un buen equipo al que el nuevo entrenador le ha dado una buena dinámica. Su juego es similar al que practicaban cuando vinieron al Martínez Valero y empatamos. Su campo es una cancha difícil».

Para este partido, «el Elche está mucho más fuerte». Físicamente, «con jugadores ya recuperados y otros que salen de la sanción». Anímicamente. «Tras una buena segunda parte que nos dejó una buena sensación con el Villarreal». De hecho, el míster así lo ve en los entrenamientos, en los que «cada vez hay más jugadores disputándose los puestos y esto, sin duda, mejora la competitividad de los futbolistas y del equipo».

Sobre los convocados, el técnico franjiverde dijo que «Fidel está muy bien pero no quisimos arriesgar. Nino tiene una molestia que no es grave, pronto volverá». Además, recalcó que Helibelton Palacios «no está para entrar de titular, pero viajará con el equipo. Físicamente está muy fuerte y le falta coger ritmo entrenando y compitiendo».

Con la plantilla más completa, «tenemos más variantes para afrontar los partidos de una forma más competitiva y, sobre todo, para poder hacer los cinco cambios y tener diferentes posibilidades».

En cuanto a la afición, el técnico argentino señaló que debe «seguir confiando en el equipo. Su apoyo -con la pancarta instalada por la peña Jove Elx- es siempre muy importante, más allá de cualquier situación concreta. Es esencial que el jugador sienta el apoyo de la gente. Es un buen aliciente para él». Y parece que van a haber nuevos refuerzos. Según el técnico, «quedan dos fichas libres y estamos buscando. Todavía hay opciones. Se está negociando con jugadores para aprovechar esas dos fichas». Es más, el propietario del club, Christian Bragarnik, «regresará la semana que viene -no sé exactamente el día-, para intentar cerrar esos fichajes. Hay que elegir bien», pero ya se puede decir que «están en proceso».

Con el máximo accionista, Almirón habla «cada vez que finaliza un partido. Sobre detalles del juego. Pronto estará por aquí, está a unos días de llegar a la ciudad para definir las dos fichas que quedan libres». El propietario «tiene mucha experiencia en el mundo del fútbol. También la gente que le rodea, por lo que conoce perfectamente la situación del club, cómo tuvimos que hacer un equipo de Primera en muy poco tiempo. No digo que fuera una sorpresa el ascenso, pero sí que tuvimos que trabajar a marchas forzadas. Ahora se están dando unos ajustes. El equipo está recuperando jugadores lesionados y estamos mejor. Pero ya sabíamos al principio que, para nosotros, cada partido que jugáramos iba a ser una final».