Pudo ganar, pero también pudo perder. Al final, el punto conseguido por el Elche en Getafe sabe a gloria y permite al conjunto ilicitano seguir remando en su camino hacia la permanencia. Los franjiverdes llegan al parón y afrontarán los últimos diez partidos con dos puntos de ventaja sobre la zona de descenso.
Pero lo más importante son las sensaciones que sigue dejando el equipo de Escribá, que continúa creciendo y es capaz de competir en cualquier campo y contra cualquier tipo de rival. Y eso hace albergar esperanzas de poder alcanzar la meta de la permanencia.
El Elche demostró en el Coliseum Alfonso Pérez que no rehúye a ninguna guerra y que es capaz de adaptarse a cualquier circunstancia del juego. Y si encima sigue teniendo un santo como Edgar Badia en el portería los argumentos para obtener el premio final aumentan.
El portero catalán se erigió una vez más en salvador. Faltaban diez minutos para terminar un partido que fue una auténtica «guerra» y que terminó con nueve tarjetas y con dos jugadores: Piatti y Timor con la cabeza vendada. El colegiado canario Hernández Hernández, tras consultar con el VAR, señaló un injusto penalti por unas manos totalmente involuntarias de Gonzalo Verdú. Todo se veía negro. Pero en ese momento, por enésima vez, emergió la figura del guardameta franjiverde que sacó una mano prodigiosa y le detuvo el lanzamiento a Ángel. El susto se tradujo en una alegría infinita, que permitía al Elche, por fin, sumar su primer punto a domicilio de la era Fran Escribá.
Una derrota hubiera sido un castigo totalmente inmerecido, porque el conjunto ilicitano no fue inferior al Getafe y se mantuvo en todo momento erguido en una batalla, que tuvo acciones de todo tipo al límite del reglamento y juego subterráneo por parte de los ambos equipos. Unas características más propias del fútbol que practica el Getafe, pero a las que el Elche no se quedó atrás.
Como se preveía, fue un encuentro muy trabado, con un juego atascado desde el disparo de salida. Escribá realizó tres cambios con respecto al equipo que jugó el pasado miércoles en Sevilla. Como se esperaba, Mojica volvió al lateral izquierdo y Tete Morente ocupó la banda derecha. La sorpresa fue ver inicialmente a Pere Milla en lugar de Guido Carrillo como acompañante de Lucas Boyé en la punta del ataque. Una decisión que también le salió bien al técnico valenciano.
Los franjiverdes entraron activos al partido. Quisieron más y dominaron más la pelota en los primeros minutos. Sobre todo crearon peligro por la banda derecha con un activo Tete Morente. El Getafe no era capaz de acercarse al área ilicitana, salvo algunos esporádicos fogonazos del japonés Take Kubo.
La mejor puesta en escena del Elche tuvo su premio a los 19 minutos. La estrategia otra vez funcionó. Fidel sacó un córner en corto hacia Mojica, el colombiano metió el balón al área y tras peinarlo un defensor local le llegó al segundo palo a Gonzalo Verdú, que puso la pelota en el área pequeña para que Pere Milla solo la tuviera que empujar al fondo de la red. El héroe del ascenso justificaba su titularidad y ponía en franquicia a los suyos. Incluso, Boyé, tras una falta lanzada desde la derecha de Tete Morente, pudo marcar el segundo de cabeza.
El conjunto de Bordalás estaba totalmente maniatado.
En la recta final del primer periodo, el árbitro canario Hernández Hernández comenzó sus capítulos de protagonista. Señaló penalti por un supuesto pisotón de Dani Calvo a Enes Unal. El catalán Mendié Jiménez le pidió desde el VAR que revisara la jugada y, tras consultar la imágenes, abortó la pena máxima. Al descanso 0-1 y muy buenas perspectivas para los ilicitanos.
Bordalás saca a Ángel
A los pocos minutos del inicio del segundo tiempo, Bordalás sacó al exfranjiverde Ángel, talismán en los últimos enfrentamientos ante su exequipo, y a punto estuvo de volver a serlo. El Getafe pasó a dominar más el juego con Kubo por la banda derecha y Aleñá más en labores más de construcción.
El japonés probó a Edgar Badia en un golpe franco y poco después dribló a Mojica y puso un buen balón en el área pequeña. Enes Unal controló, Gonzalo Verdú llegó tarde y, encima, se resbaló y el turco anotó el empate.
El partido comenzaba a torcerse. Escribá intentó dar más oxígeno al ataque sacando a Guido Carrillo por Pere Milla y a Piatti por Tete Morente. Los azulones daban más sensación de peligro, pero con disparos de fogueo. Los minutos avanzaban sin grandes alteraciones en el juego. Solo la lucha cuerpo a cuerpo y alguna que otra entrada a destiempo y con excesiva dureza agitaban el choque.
La tempestad se había traducido en cierta calma y el encuentro caminaba hacia el empate.
Pero Hernández Hernández no estaba contento con su poco afán de protagonismo. Ya fue portada de los periódicos en el derbi entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid al no señalar unas manos del rojiblanco Felipe tras un saque de esquina de Kross al considerarlas involuntarias. Y ayer también lo fue. Tras consultar con el VAR decretó penalti por unas manos, totalmente involuntarias, de Gonzalo Verdú en una acción con Ángel, que el delantero remató y Edgar Badia volvió a salvar el gol.
El árbitro canario le dio una nueva oportunidad al tinerfeño desde los once metros. El exfranjiverde podía volver a castigar al Elche desde el punto de penalti, ya marcó de pena máxima en la primera vuelta. Pero Edgar Badia no estaba dispuesto. Le aguantó muy bien y a mano cambiada le detuvo el lanzamiento evitando lo que hubiera sido a todas luces una injusticia, porque ni fue penalti, ni el Getafe había sido mejor que el Elche en el global del partido.
El reparto de puntos fue lo más justo porque ningún equipo acumuló argumentos suficientes para haber decantado de su parte la dura guerra librada en el Coliseum.
FICHA TÉCNICA:
GETAFE: David Soria, Iglesias, Djené, Sofian Chakla, Olivera, Maksimovic (Ángel, m. 49), Arambarri, Aleñá (Timor, m. 86), Take Kubo (Portillo, m. 72), Cucurella y Esnel Unal (Dario Poveda, m. 86)
ELCHE: Edgar Badia, Helibelton Palacios, Gonzalo Verdú, Dani Calvo, Mojica, Iván Marcone, Raúl Guti, Tete Morente (Piatti, m. 76), Fidel, Pere Milla (Guido Carrillo, m. 63) y Lucas Boyé.
GOLES: 1-0 m. 19, Ángel. 1-1 m. 59, Esnal Unal.
ÁRBITRO: Hernández Hernández, del colegio canario. Mostró tarjetas amarillas a Arambarri (m. 24), Marcone (37), Chakla (m. 45+), Lucas Boyé (45+), Dani Calvo (m. 54), Pere Milla (m. 62), Guido Carrillo (m. 65), Fidel (68) y a Timor (m. 90+).
ESTADIO: Coliseum Alfonso Pérez. Sin público.
