El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Elche aseguró ayer que lo que ha hecho este partido con respecto al cambio de postura en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) es un ejercicio de «responsabilidad para garantizar la estabilidad municipal».
La portavoz del grupo municipal, Patricia Macià, así lo expresó, al tiempo que constató que hubo un «cambio de criterio de otro grupo» -Ilicitanos por Elche- y no del PSOE», para recordar que los socialistas gobiernan «con dos fuerzas más».
«Es un gobierno plural y se llega a consensos para lograr ese equilibrio», añadió la edil socialista, quien, por otra parte, reconoció que no hubo presencia socialista en la reunión durante el pasado el fin de semana -domingo por la noche, según aseguró ayer el PP- entre al menos Cristina Martínez (Ilicitanos) y Mireia Mollà (Compromís) donde se gestó el cambio de postura para que el IBI «bajara» del 1%, como se había aprobado en junta de gobierno a que lo hiciera un 3,48% en un cambio casi de última hora.
Macià aclaró que pese a no estar «físicamente«, sí que el PSOE estuvo informado de lo que estaba ocurriendo, al tiempo que acusó al PP de «irresponsable» por defender una «bajada» del 10% en el IBI ya que, según indicó, no se puede bajar esta cantidad el IBI ya que el Ayuntamiento quedaría bloqueado.
«Es entendible que haya dudas»
Por su parte, el edil Antonio García (Compromís), reiteró ayer que «el orden de los factores no altera el producto» y que el tema del IBI es algo que habían acordado los tres partidos. «Es entendible que haya dudas de alguna parte y que se tengan que llegar a acuerdos», añadió.
Por su parte, el grupo municipal del PP volvió a arremeter ayer contra el tripartito, al que acusó de estar «por encima del bien y del mal», subrayó su «desgobierno» e incluso invitó al alcalde, Carlos González, a marcharse «si no sabe o no puede gobernar».
«Ha quedado demostrado que no hay gobierno en la ciudad de Elche, estamos ante un tripartito que toma decisiones premeditadas y sin ningún tipo de previsión ni medida. No hay rumbo, no hay gobierno y tenemos un alcalde que de forma consentida se deja ningunear por sus socias de gobierno y nos deja una ciudad sin rumbo», declaró ayer el edil popular Vicente Granero.
El concejal lamentó que se tomen las decisiones «según se levante uno ese día», para recordar que en pocas semanas «se han presentado hasta tres propuestas sobre el IBI. Tampoco sabemos cuál va a ser la definitiva, ya que empezaron con una subida del 10% y ahora hablan de una subida del 8 o del 7%.
Los populares remarcan que en el pleno del pasado lunes, donde se trató el tema del IBI, un miembro del propio tripartito presentó una enmienda «en contra de su propia propuesta que ya venía establecida en la comisión de Hacienda y ratificada por la propia interventora».
Entre otras cosas, para el PP la gravedad del asunto radica en que la propuesta realizada por Compromís en el pleno «se gestó en una reunión el domingo por la noche. ¿Dónde estaba la concejala de Hacienda? Dos partidos minoritarios toman aquí la decisión. ¿Con qué documentación deciden plantear y cambiar la propuesta del IBI? ¿Tenían algún informe de la interventora? ¿Había técnicos de Hacienda en esa reunión?»
Para el PP, lo único que está claro es que el IBI «está subiendo, al igual que las tasas municipales en urbanismo, cementerios o en la expedición de documentos administrativos».
«Altura de miras»
Por su parte, la Asociación Ágora de Elche, pidió ayer sensatez en el tema del IBI. A través de una nota de prensa reclaman a los representantes políticos municipales, entre otras muchas cosas, «altura de miras y más sentido común, y les pedimos que dejen de una vez de realizar interpretaciones teatrales, que lejos de acercarles a los ciudadanos, producen cada vez más rechazo».
