¿Cuándo se constituirá definitivamente el nuevo instituto de ingenierías de la UMH?
Fuimos creados por la UMH como centro de investigación en febrero de 2019 y ahora vamos a dar el paso para ser instituto. Es un asunto prioritario para el equipo rectoral. Actualmente tenemos recopilada toda la información necesaria. El instituto contará con cuarenta miembros a tiempo completo con capacidad investigadora y, al menos, un sexenio activo. Agrupamos la mayor parte de las áreas relacionadas con ingenierías industriales y de telecomunicaciones.
¿Qué valor añadido aportará el instituto a la Universidad?
Actualmente hay doce grupos de investigación realizando su labor sin interactuar entre sí. Con el nuevo instituto lo haremos y podremos abordar proyectos más complejos. Todos los grupos tenemos un nexo común pero trabajar de forma conjunta y de manera continuada nos dará beneficios y visibilidad ante las empresas de la zona. Permitirá que sepan cuál es nuestra capacidad para solventar los problemas que tienen actualmente.
¿Cuál es el momento actual de las ingenierías en la UMH?
Las ingenierías siempre han gozado de buena salud. Son titulaciones complicadas para el estudiante, se les demanda capacidades elevadas en determinadas materias. En España, la situación desde hace 50 años es positiva, no hemos sufrido las crisis ni los altibajos de otros estudios. La demanda de estudiantes es elevada y la de las empresas con los egresados también lo es.
¿Qué investigaciones predominarán en el medio plazo?
Vamos a trabajar en los mismos campos en los que somos especialistas, como la comunicación entre móviles, las energías renovables, las instalaciones fotovoltaicas, la robótica, la Inteligencia Artificial, las interfaces cerebrales? También profundizaremos en el desarrollo de vehículos y la innovación mecánica. La colaboración entre grupos permitirá que surjan nuevas líneas de investigación.
¿Cuáles son los campos de investigación más emergentes?
El proceso siempre es lento, la investigación se realiza en etapas incipientes y los resultados no se ven, al menos, hasta 10 o 15 años. Un ejemplo típico lo encontramos en los robots aspiradores que ahora se comercializan y cuyos algoritmos se desarrollaron hace más de una década. Esa es la diferencia entre la investigación y la transferencia de los productos a la sociedad.
¿Cómo es la relación que mantiene la UMH con el tejido industrial del entorno?
Uno de los objetivos del nuevo instituto de la UMH es el de acercarnos más a la transferencia. Hasta la fecha, le relación es fluida, los investigadores colaboramos con diversas empresas afines. La relación es positiva en cuanto a asesoramiento, proyectos de desarrollo, prestación de servicios y contratos.
Una gran apuesta es la de la Inteligencia Artificial...
Tiene una importancia capital para nosotros, forma parte de nuestra línea de investigación básica. Es transversal, se puede aplicar en salud, energía, medio ambiente, economía? Nosotros contamos con especialistas, como los que se dedican a la visión artificial o la robótica. Los algoritmos se aplican en múltiples ámbitos, desde el reconocimiento de entornos hasta la extracción de características visuales, pasando por el reconocimiento de las señales que recogen las interfaces cerebrales. El algo horizontal que se aplica en todo.
