Hoy finaliza el plazo de ejecución de la obra de peatonalización de la Plaça de Baix y la Corredora, tras la prórroga de 23 días que concedió el Ayuntamiento a la empresa adjudicataria, que pidió más tiempo para entregar el proyecto debido a los imprevistos que ha tenido que atender. Extras no contemplados en el proyecto inicial que el grupo municipal del PP solicita que se cuantifiquen para conocer el importe del sobrecoste de los trabajos. El proyecto se adjudicó a la mercantil Aglomerados Serrano por un total de 542.707 euros.
El plazo de ejecución previsto para los trabajos era de cuatro meses, pero varios han sido los contratiempos o añadidos que se han tenido que resolver y que, apuntaron desde el PP, «supondrá más coste económico».
Entre ellos están los trabajos de extracción y traslado de los tres mosaicos que había en la Plaça de Baix, y que se consideró apropiado trasladar a otras zonas de la ciudad «dado el interés cultural que ostentan». Entre ellos está el mosaico de Sixto Marco.
Otra unidad de obra complementaria al proyecto, que anunció el propio alcalde, Carlos González, al empezar la ejecución del proyecto, es la que tiene que ver con la repavimentación de la calle Victoria. El informe municipal que avaló esta intervención apunta que «no actuar sobre esta vía generaría una zona residual aislada de su entorno, generando problemas de diferentes rasantes y desniveles con el vial peatonalizado».
Durante la obra también se consideró la necesidad de aumentar la canalización para el sistema de alumbrado de la luminarias empotradas en el pavimento de la Corredora, y se decidió mantener los imbornales de esta calle, sumando los nuevos previstos en el proyecto. Esto último obligó a sumar trabajos para subir a la cota del nuevo pavimento los antiguos imbornales.
También se contemplaron nuevos servicios en la Plaça de Baix como instalación complementaria de alumbrado público, instalación de megafonía, conexión para señal de televisión, o instalación de telecomunicaciones y datos.
En definitiva, una serie de imprevistos que motivarán, según dijo el PP, «un sobrecoste». Por este motivo, el edil popular José Navarro, criticó la falta de previsión del equipo de gobierno. José Navarro dijo que «estamos ante el gobierno de los sobrecostes, y el gobierno de los retrasos, y tenemos que acudir a la letra pequeña para enterarnos de un nuevo sobrecoste en las obras, está vez, de la obra de la Corredora de la Plaça de Baix».
En este sentido, José Navarro lanzó una pregunta al equipo de gobierno: «¿Cuánto nos cuesta a todos los ilicitanos esta manifiesta incapacidad de gestión? Obra que realizan, obra que excede del importe inicial. Ya ocurrió en las obras de Nuestra Señora de la Cabeza y ahora con la Corredora y la Plaça de Baix».
El popular añadió que «aquellos que tanto énfasis ponían en tener una obra en tiempo récord, vemos como no tenían prevista la instalación de alumbrado, la retirada de los mosaicos, o la instalación de elementos de telecomunicaciones. Incluso el pequeño tramo de la calle Victoria o la canalización de aguas pluviales». Finalmente el popular José Navarro denunció «silencio y hermetismo cuando se trata de anunciar este tipo de sobrecostes».
32.000 euros, los extras en «Nuestra Señora de la Cabeza»
A la hora de hablar de sobrecostes en obras, el PP también apuntó a la actuación que se está llevando a cabo en la calle Nuestra Señora de la Cabeza, que acabará un mes más tarde de los previsto por varias causas. Una es la necesidad de soterrar líneas eléctricas, que no estaba contemplado en el proyecto, y la otra son mejoras añadidas al proyecto adjudicado por el Ayuntamiento de Elche, que suponen un sobrecoste de 32.000 euros, sobre los 264.000 euros con los que se adjudicó a la empresa que está llevando a cabo los trabajos.
