La Fiscalía ha solicitado 21 años de prisión para un hombre de 56 años acusado de retener y violar a una joven de 22 años y con una discapacidad intelectual del 66%. Lo hechos ocurrieron en agosto del año pasado en Elche cuando, según sostiene la acusación, el procesado abordó a la víctima en un parque, en las inmediaciones de la plaza de Crevillent, y la convenció para que fuera a su casa. Una vez allí, la habría agredido sexualmente en varias ocasiones, sin dejarla volver a su casa. Por eso, la Fiscalía le imputa tanto un delito continuado de agresión sexual como un delito de retención ilegal.

La madre de la menor denunció su desaparición en la madrugada del día en el que se produjeron los hechos, alertada porque ésta, que frecuentaba ese parque a diario, no llegaba a casa. Su familia estuvo buscándola por el barrio sin éxito, hasta que apareció a la mañana siguiente. En un primer momento, la joven ocultó lo que había sucedido, tal y como reza en la denuncia interpuesta por su madre. No fue hasta que ésta insistió en que le contara dónde había estado, cuando confesó la agresión sexual.

La madre puso en conocimiento de la Policía Nacional lo sucedido y se activó el protocolo para los casos de agresiones sexuales. El parte médico confirmó que había sido agredida, y con el testimonio de la víctima, que no sabía volver al lugar al que fue llevada inicialmente, comenzó la búsqueda del presunto autor. No obstante, finalmente, éste fue reconocido por la víctima en plena calle, ya que también frecuentaba asiduamente el parque de la Plaza de Crevillent, próximo a la vivienda de ambos.

Detención

La Policía Local de Elche acabaría deteniendo al acusado, que continúa en prisión a día de hoy según confirmó ayer el abogado de la víctima, Juan Luis Benítez. El letrado explicó que mantienen la misma petición de pena que la Fiscalía, así como una petición de indemnización de 30.000 euros para la joven. En un primer momento, el acusado negó la agresión sexual. Sí reconoció ante el Juzgado de Instrucción que realizó las diligencias de investigación que había mantenido relaciones con la joven, pero alegó que éstas fueron consentidas. Un extremo que no convenció a los magistrados ni del juzgado de la Audiencia Provincial, que desestimaron la petición de puesta en libertad provisional a la espera de juicio. Será este órgano precisamente el que juzgue el caso, que se ha señalado para los días 14 y 21 de enero.