El Ayuntamiento de Elche impulsará la construcción de un sendero regulado que perimetre el parque de El Hondo desde el término municipal y que incluirá una nueva torre mirador en el parque natural. El proyecto todavía está en fase de redacción, aunque si bien ya ha recibido las críticas de ecologistas de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA). El colectivo entiende que esta nueva inversión para el entorno natural generará un impacto negativo para la avifauna, un impacto que de antemano descartan desde la Junta Rectora del Parque Natural, desde donde exponen que este proyectó sólo mejorará el acceso al visitante desde Elche.
Aún y así, desde AHSA piden informes preceptivos a la Generalitat para que determine si es correcto o no el planteamiento del proyecto según la normativa en vigor. Aseguran que tras asistir a un encuentro con representantes de la concejalía de Medio Ambiente se determinó que el sendero discurrirá por el interior del parque a través de la Reserva de Fauna Suso Huertas, propiedad de la Generalitat Valenciana y situada en el extremo sureste de este espacio natural.
Al hilo los ecologistas criticaban este miércoles que el nuevo mirador no contribuirá significativamente al conocimiento y divulgación de sus valores ambientales porque aseguró que en la zona ya hay otros. Es más, señalan que la zona expuesta está catalogada en el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) como de Protección Especial Integral por lo que dudan que sea beneficioso el nuevo mirador.
Sin embargo, desde la Junta Rectora de El Hondo matizan que las actuaciones para el parque natural no tendrán ningún impacto negativo ya que se contribuirá a regular el acceso al parque desde Elche y descartan, igualmente, que esta futura ruta atraviese las reservas y sus huertas porque tienen protección integral.
Vicent Sansano, presidente de la Junta, desmintió ante este diario ayer que la inversión vaya a causar un perjuicio para el ecosistema y puntualizó que el sendero perimetrará el parque pero no se adentrará por las charcas ni zonas protegidas.
Exponen desde la Junta Rectora que esta será una actuación periférica y que además continuará la ruta azul que se observa en el mapa que pueden ver los visitantes. La actuación será en la zona noroeste del parque y aclaran que no se abrirá «ni un solo metro de viales nuevos, todo se va a hacer por un camino que ya existe y que está abierto al público por lo menos en su mayor parte porque no hay ningún impacto», narra Sansano.
Así las cosas, quieren aclarar desde el parque natural que la inversión no se hará junto a ninguna laguna que impacte para la protección de la cerceta. Aún y así, reconocen que el área de actuación tiene un alto valor ecológico «pero no más que cualquier otra zona del parque» como pudiera ser la Raja Chica o la Raja que se ha adquirido en el proyecto Life para la protección de la cerceta, señalan desde el parque.
Por otra parte, apuntan desde la Junta Rectora que esta actuación será una oportunidad para abrir la ruta desde Elche, «porque el parque tiene todos los accesos abiertos desde Crevillent», apuntan. Señalan desde El Hondo que la intervención traerá una mayor protección de ciertas zonas para evitar la invasión de saladares.
De igual forma, sólo podrán acceder peatones y ciclistas, sin que esté permitido el acceso a vehículos a motor con la nueva actuación. De igual forma, plantean desde el parque que se eliminen accesos incontrolados a las zonas de charcas.
En cuanto a la torre proyectada, será de unos tres metros de altura para observar paisajes como la sierra de El Molar o la sierra de Crevillent pero sin afectar a las charcas.
En respuesta a AHSA sobre el aval de la Generalitat, desde la Junta Rectora inciden en que el proyecto, elaborado por técnicos municipales, no se ha terminado de redactar y por tanto no se ha presentado a nivel autonómico, ya que también deberá ser autorizado por el director conservador del propio parque.
AHSA, sin embargo, considera que este tipo de instalaciones fomentarán la llegada de más visitantes al lugar «y promover la afluencia incontrolada de personas y la construcción de una torre observatorio, en un enclave de alto valor ambiental, es contrario a los objetivos de conservación de los ecosistemas y del acercamiento y disfrute de éstos a la ciudadanía, que deben guiar las actuaciones en los espacios naturales protegidos», critican.
