El Hospital Universitario del Vinalopó atiende una media de 700 pacientes paliativos al año. El centro hospitalario, gestionado por el grupo Ribera, es el tercero de la provincia de Alicante en contar con una Unidad de Cuidados Paliativos intrahospitalaria que va más allá de la humanización en la última fase de la vida. Así, ha prestado asistencia a más de 2.800 pacientes paliativos en los últimos cuatro años.
Una atención que se ofrece a través de unidades especializadas como esa Unidad de Cuidados Paliativos intrahospitalario, puesta en marcha en noviembre de 2021, la Unidad de Hospitalización a Domicilio (UHD) y un programa de seguimiento del paciente paliativo a través de Lola, un asistente virtual y enfermera gestora, un proyecto novedoso y que está teniendo muy buenos resultados.
La mayoría de estos pacientes vienen derivados de Atención Primaria o de servicios especializados como Oncología, Medicina interna y Nefrología, explica Guillermo Losa, jefe de la UHD. "Gracias a los protocolos establecidos, son pacientes que ingresan de forma programada, siendo trasladados directamente desde su domicilio a la planta de hospitalización evitando, así, su paso por el servicio de Urgencias", señala. En los últimos cuatro años, los pacientes paliativos han supuesto el 35% de los pacientes atendido por la Unidad de Hospitalización a Domicilio. Se han atendido en esta unidad más de 2.000 llamadas telefónicas relacionadas con su cuidado y asistencia, incluyendo a más de 700 pacientes en el programa de seguimiento del paciente paliativo.
La Unidad de Cuidados Paliativos Intrahospitalaria ofrece un recurso adicional a los pacientes paliativos en situación de extrema fragilidad y a sus familiares que decidan culminar su seguimiento en el entorno hospitalario. El Hospital Universitario del Vinalopó cuenta con todas sus habitaciones de hospitalización individuales "lo que permite asegurar a estos pacientes el máximo respeto a su intimidad, acorde con la Ley 16/2018 de los derechos y garantías de la dignidad de la persona en el proceso de atención al final de la vida", explican desde el centro hospitalario.
Todas las intervenciones iniciadas en el domicilio por parte del personal de la UHD se culminan en el ámbito hospitalario por un equipo especializado en cuidados paliativos que ofrece soporte psicológico y religioso. "De esta manera, se da respuesta a los problemas inherentes a la terminalidad a través de la prevención y alivio del sufrimiento, físico, psíquico y espiritual, primando durante toda la intervención la calidad de vida y el adecuando control sintomático", asegura el doctor Losa.
Lola, el asistente virtual
El departamento de salud cuenta también con la inteligencia artificial y tecnología de voz a modo de cuidador virtual para pacientes paliativos, atendidos por la UHD. Este servicio permite el seguimiento de pacientes paliativos oncológicos o no, con la tecnología de la startup TUCUVI, apadrinada por el grupo sanitario Ribera dentro del programa Corporate de la aceleradora de empresas Lanzadera.
El objetivo fundamental es ofrecer un recurso adicional a los pacientes en esta difícil etapa de su vida. Con las pautas y protocolos establecidos, Lola, la asistente virtual, llama por teléfono a los pacientes, entablando una conversación inteligente para ofrecer y recopilar información y establecer indicadores que permitan a los profesionales revisar la progresión de la enfermedad y prevenir un empeoramiento en su salud.
Desde junio de 2021 más de 400 pacientes paliativos han sido seguidos por el asistente virtual Lola con más de 2.400 alertas recibidas y 1.200 intervenciones realizadas.
