Vecinos de una pedanía de Elche paralizan por cuarta vez la instalación de una antena

La Policía Local ordena detener el montaje junto al centro social tras la llamada de los residentes

La azotea del edificio de Las Bayas donde ayer se volvió a instalar una antena de telefonía móvil.

La azotea del edificio de Las Bayas donde ayer se volvió a instalar una antena de telefonía móvil. / INFORMACIÓN

A. Fajardo

A. Fajardo

Cuarto intento para instalar una antena de telefonía móvil en Las Bayas que pone en pie de guerra a los vecinos. Una empresa volvió a retomar este lunes el montaje de la infraestructura en la azotea de un edificio pegado a un centro social. Lograron trabajar cerca de tres horas, pero residentes de la pedanía ilicitana llamaron a la Policía Local y los agentes acabaron paralizando la obra.

Los técnicos consiguieron montar dos paneles de una antena que lleva prácticamente cuatro años tratando de colocarse porque cada vez que la compañía reanuda sus pretensiones, los vecinos consiguen detenerlos. 

Y es que los que se oponen a su instalación insisten en que incumple la legislación que impide colocar estos dispositivos a menos de 100 metros de centros sociales, educativos o sanitarios, por lo que temen por su salud en el caso de que la antena se ponga en funcionamiento. 

De hecho, ellos mismos fueron los que aportaron a la Policía Local documentación para parar un montaje que carece de autorización municipal.

 Está previsto que este martes un subinspector visite la instalación para averiguar qué pasa. Los vecinos de sus alrededores reclaman que se desmonte de una vez la instalación porque cada cierto tiempo la empresa acude a la azotea del edificio para avanzar hasta que ellos llaman a la Policía. Y así han conseguido que la infraestructura esté prácticamente colocada.

Desde hace una década la proyección de esta antena está generando opiniones en contra. El Ayuntamiento de hecho ha planteado en varias ocasiones abrirle un expediente la compañía, tras las numerosas actas policiales levantadas.

Sin embargo, los vecinos, temen que sigan instalando el resto de componentes y una vez que la consigan conectar, tengan que verse abocados a ir a los juzgados con el tiempo y dinero que eso supondría, pero lo peor para ellos, con la antena ya funcionando.

Otro caso en Altabix

Una cruzada contra las antenas también llevan años emprendiendo vecinos de la avenida de Alicante, en Altabix. Más de 700 firmas fueron presentadas al Ayuntamiento hace cinco años para averiguar si cumplen con la normativa municipal y también persiguen que se estudien los efectos negativos que tienen las ondas en la salud de las personas. En este caso, en un radio de 200 metros existen al menos seis antenas, lo que ha generado preocupación en el barrio.