Pinoso actualiza la tasa y el vertido de escombros ya no recaerá en el municipio

El Ayuntamiento de Pinoso cuenta con una nueva ordenanza fiscal reguladora de la tasa por vertido de residuos de construcción y demolición. Su finalidad es regular la gestión y los movimientos de desechos procedentes de obras menores que se realicen en el municipio, ya sea por parte de los constructores o de los promotores, y con el objetivo de que los escombros sean depositados en el emplazamiento establecido por el Ayuntamiento o en un centro autorizado.

Así pues, a partir de ahora las cubetas se pesarán por báscula para que se abone el coste económico que corresponda por su peso. La tarifa que se propone inicialmente oscilará entre los 14 y 22 euros por tonelada, aunque ahora comienza un proceso de adaptación para mejorar la ordenanza. Los residuos se podrán depositar en el punto limpio, ya sean restos de tierra, arenas y similares, suelos, piedras y baldosines, el resultante de movimiento de tierras y sobrantes de obras, desechos de poda, siega o desbroce de jardines. Para el alcalde Lázaro Azorín esta medida es un ejercicio de «sentido común», a lo que la edil Silvia Verdú ha añadido que lo que se pretende es «que cada cual asuma el coste real del traslado y tratamiento de sus residuos», y que no revierta ese coste sobre las arcas municipales o sobre los propios ciudadanos, «que hasta ahora han venido soportando cargas fiscales sobre algo que no generan», ha puntualizado la edil de Gestión de Residuos.

Tras esta nueva ordenanza hay mucho trabajo previo con constructores y empresarios, a quienes más les afectará esta normativa, ya que tras el cierre del vertedero municipal de Pinoso ahora se trasladan estos materiales a una planta de transferencia en Monóvar.