Un estudio pionero de la UA identifica 49 especies de arañas en el Arenal de Petrer

El Consell aprueba la catalogación de este singular enclave natural como Zona de Especial Conservación

El Arenal de l'Almorxò  de Petrer.

El Arenal de l'Almorxò de Petrer. / INFORMACIÓN

Pérez Gil

Pérez Gil

Un estudio dirigido por el profesor Jesús Hernández, doctor en Biodiversidad y Conservación de la Universidad de Alicante, ha identificado 49 especies distintas de arañas, un 16% endémicas, en el estudio realizado en el Arenal de l’Almorxó en Petrer.

El estudio que se ha realizado en el Instituto Universitario de Investigación de la UA es pionero en este tipo de hábitat ya que “el tema de los arenales en España, desde el punto de vista de las arañas, es desconocido”, ha indicado el profesor Hernández señalando que “es la primera vez que se hace un estudio de esta naturaleza, poniendo en valor la aracnofauna de estos enclaves”.

El concejal Fernando Díaz recibiendo el estudio del profesor Jesús Hernández.

El concejal de Petrer, Fernando Díaz, recibiendo el estudio del profesor de la UA, Jesús Hernández. / INFORMACIÓN

Hace unos días el pleno del Consell ha aprobado la declaración como Zona Especial de Conservación seis espacios naturales en las comarcas centrales de la provincia de Alicante entre los que se incluye el Arenal de Petrer. Zonas de gran interés medioambiental y de especial relevancia para la conservación de las aves, y que están integradas en la Red Natura 2000, cuyo objetivo es proteger la biodiversidad y hacer compatible la conservación de las especies y de los hábitats naturales con la actividad humana.

Edad del Hielo

El Arenal tiene una superficie de 50 hectáreas, se localiza en el monte de utilidad pública "Cotxines" y, según los estudios elaborados por la Universidad de Alicante, se formó durante la pequeña Edad del Hielo (siglos XV-XVII) a través de la meteorización mecánica del Valle del Vinalopó. Un sistema natural consistente en la desintegración física de las rocas en minúsculos fragmentos debido a los cambios de temperatura, la humedad y la actividad biológica.

De hecho, el 97% del material de l'Almorxó son granos de arena de menos de 2 milímetros de diámetro que las corrientes de aire procedentes del norte de África se encargan de transportar depositándolos en la loma y dando lugar a una formación única. Un paraje donde décadas atrás era tradición llevar a los niños para su esparcimiento los fines de semana y comerse la mona en la Pascua. Una costumbre que, sin embargo, se prohibió para preservar la singularidad de un paisaje protegido pero amenazado desde la década de los años 70.

En Petrer hay otro arenal, el de Pruna, que es más pequeño y menos conocido aunque también está sufriendo el mismo proceso de degradación.