El próximo 20 de octubre el Teatro Principal acogerá la II Gala de Empresas Centenarias de la provincia de Alicante, cita que el pasado ejercicio quedó aplazada por la pandemia. Y es que cada año, las entidades organizadoras -Cámara de Alicante y Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (AEFA), con el patrocinio de Cajamar y la Diputación de Alicante, se han propuesto homenajear a varias empresas documentadas con cien años de historia en una gala anual e invitarlas a pertenecer al Club de Empresas Centenarias de nuestra provincia.
Este año se reconocerá a siete compañías que acumulan más de un siglo de vida a sus espaldas. Una de ellas es Aceitunas Bernal, que lleva 121 años elaborando aceitunas en Callosa de Segura y que cuenta con una enorme proyección nacional e internacional.
Así comenzó todo
En el año 1900, el agricultor José Bernal comienza con el cultivo de alcaparra y aceituna en los campos de Murcia y alrededores. Nace, así, Aceitunas y Encurtidos Bernal, empresa de tradición familiar actualmente regentada por su cuarta generación.
Orgulloso de la tradición, José Bernal enseña a su nieto José, quien queda huérfano a temprana edad, las artes de este singular cultivo. Iniciándose en 1930 la segunda generación de la empresa y un legado que ha llegado hasta la actualidad.
En sus comienzos, la venta de sus productos era itinerante en viajes de más de 24 horas de duración, siendo la mercancía transportada en carros tirados por burros. Hoy en día, aceitunas Bernal cuenta con su propia flota de transporte que permite trasladar sus productos a cualquier rincón del planeta.
En 1960 llega la tercera generación, con Antonio Bernal Cuartero como gerente, renovando las instalaciones y abriéndose al mercado nacional. Desde entonces hasta la actualidad, el crecimiento de la empresa ha sido exponencial, atravesando los cambios de industrialización y movilidad de cada época, siempre a la vanguardia.
Gran distribución, mercado nacional y exportaciones
La cuarta y actual generación, liderada por los hermanos Bernal Verdú desde 1990, vuelve a renovar las instalaciones, ofrece una nueva imagen de marca y se inicia en la venta a la gran distribución y la exportación, llegando en 2014 hasta los Estados Unidos.
Actualmente, Aceitunas Bernal lidera el mercado nacional y dedica un 30% de sus ventas a la exportación, comercializando en más de 25 países sin olvidar el compromiso constante con la actualización de sus instalaciones para ofrecer los máximos resultados.
Así, 16.000 m2 de infraestructuras y una labor de I+D+i son clave para la consecución del mejor producto. Entre otras, la empresa cuenta con líneas de envasado, etiquetado… Así como una capacidad de almacenaje de más de 200 toneladas. Objetivos claros y desarrollados, unidos a programas de calidad integral, sistemas de trazabilidad total y un stock permanente, permiten ofrecer un servicio completo a todos sus clientes.
Desde 2008, Aceitunas Bernal está presente en las principales ferias de alimentación de todo el mundo: ANUGA, SIAL, salón GOURMETS, FANCY FOOD... y desarrolla constantemente nuevos productos que interesen al público.
Los productos favoritos de los consumidores
Entre sus especialidades destacan, por ser las preferidas de los consumidores, las aceitunas gordal sin hueso «toke picante», las manzanilla rellenas de almendra, las moradas cornicabra, las de cuquillo, las chupadedos, su cocktail de aceitunas y encurtidos, las gazpacha, las de mojo picón y los «kimbitos» (rellenas de pepinillo).
No obstante, su catálogo es extensísimo e incluso cuentan con variedades gourmet y aceite de oliva, con una nueva imagen de marca y packaging renovados. .
No hay duda: la cuarta generación de la familia Bernal continúa con el compromiso por el trabajo bien hecho y el respeto por la tradición inculcado por sus antepasados, y su objetivo sigue siendo llevar hasta tu mesa productos de máxima calidad que representan el sabor de nuestra tierra.
