La instalación de videoporteros y otros sistemas de seguridad en las comunidades de vecinos es una decisión fundamental para garantizar la protección de los hogares y zonas comunes. No obstante, antes de explicar las ventajas que tiene incorporar estas tecnologías en las comunidades de vecinos, es necesario conocer cuáles son las diferencias entre los porteros tradicionales y los actuales videoporteros.

Los primeros son muchos más económicos y sencillos de utilizar. Su cometido es simple: permitir una comunicación por voz. Los videoporteros, por su parte, tienen una tecnología mucho más avanzada: no solo establecen una comunicación básica, sino que también permiten observar el exterior y hay modelos capaces de establecer un registro de las personas que han llamado al hogar, recibir las llamadas en nuestro móvil o tablet sentados en el sofá sin necesidad de levantarnos, o incluso estando fuera de casa o de vacaciones, para saber quién nos visita o para disuadir a posibles amenazas.

Ventajas para las comunidades

A continuación, detallamos los principales beneficios de instalar videoporteros en las comunidades de propietarios:

  • Seguridad: es una de las mejores maneras de proteger el edificio o urbanización. Gracias a los videoporteros, los usuarios podrán ver en todo momento quién está llamando a casa, aportando gran seguridad.
  • Control: A través de estos sistemas, también se puede observar el exterior de la vivienda aunque no haya llamado nadie, de modo que podemos saber qué está pasando ante, por ejemplo, algún ruido sospechoso.
  • Comunicación segura: hoy en día, la tecnología de los videoporteros establece una codificación de la comunicación para aportar más privacidad y seguridad en las conversaciones.
  • Vinculación con sistemas de videovigilancia: algunos modelos de videoporteros permiten conectarse con sistemas de alarmas y seguridad.
  • Domótica integrada: estos sistemas también pueden llevar integradas funciones de domótica para controlar los sistemas de seguridad del hogar.
  • Captura de imágenes: algunos videoporteros pueden capturar imágenes para establecer un registro.
  • Sencilla instalación: los videoporteros presentan una instalación sencilla, a pesar de ello, se recomienda siempre contratar el servicio de profesionales expertos en el sector.

Otros elementos importantes para aumentar la seguridad

Otro de los pilares básicos para aumentar la seguridad en una comunidad de vecinos es la instalación de un sistema de circuito cerrado de televisión (CCTV), por su probado efecto disuasorio y de registro de incidencias con imágenes, a través de cámaras de videovigilancia situadas en puntos estratégicos.

También a tener en cuenta para aumentar esta protección, es la aplicación de nuevos sistemas de control de accesos en la apertura del garaje, así como en otras puertas de entrada a la urbanización (o edificio) y trasteros. En este punto, una buena opción puede ser contar con los servicios de personal de específico de vigilancia o en portería.

A continuación te mostramos un listado de instaladores de confianza: