El entrenador del Hércules, David Cubillo, disfrutó ayer ante el Orihuela de su victoria más amplia desde que dirige a los alicantinos (2-0) y se declaró especialmente contento por la capacidad de sus jugadores para superar «las dificultades y adversidades» con que se ha encontrado el equipo «desde aquel maldito día de la pretemporada en Elda» en el que Benja sufrió una lesión de gravedad en el hombro. «A pesar de todas esas desgracias, competimos al máximo, hemos dado la cara y hemos sido superiores a todos los rivales», destacó el preparador madrileño tras encajar el último contratiempo en forma de lesión antes del partido: la rotura en los isquiotibiales del lateral Raúl Ruiz, sexta baja blanquiazul.
Cubillo repartió elogios para todos sus hombres y en particular para Javi Pérez, sustituto del alicantino Raúl Ruiz. «Por su banda han venido las mejores ocasiones en la primera parte y ha dado un gran paso adelante. De los otros dos debutantes, Pedro Torres y Diego Benito, resaltó los «buenos minutos» del primero y «la pausa» que aportó el madrileño en el centro del campo en el tramo final del encuentro.
El técnico del Hércules reconoció que su equipo tuvo «más ritmo y continuidad» con el balón que en partidos anteriores, además de su habitual solvencia defensiva, e indicó que el partido del próximo domingo (12.00) en la visita al líder Ibiza será» un partido más ante un equipazo, que no tiene por qué ser definitivo».
