Acuña está siendo «mimado» al máximo. No jugó ni ante el Ebro en Copa ni en Pulpí. Está listo para ser titular.
El sistema evoluciona... y los jugadores, también. Lo hacen a velocidad diferente, pero con una finalidad idéntica. Es tan insólito verlo en el Hércules, que, en lo deportivo, no puede haber mejor noticia. Los tres «nueves» fichados para devolver al Hércules a la tercera categoría nacional están disponibles para ser titulares por primera desde que comenzó la presente campaña... más de un mes después.
Javier Acuña, Isaac Aketxe y Raúl González pueden ocupar algunas de las dos plazas que Sergio Mora reserva para coronar su 4-4-2 más ofensivo, el que utiliza cuando juega en casa. Tres delanteros diferenciales en la Liga, diferentes entre sí y complementarios en el desarrollo tanto de la fase ofensiva como de la defensiva. El perfil que más se adapta a la forma de entender el juego que propugna el ideario que comparten desde su contratación Mora y Del Pozo es el del «Toro».
El paraguayo, potente, rápido, móvil, intenso y agresivo, está llamado a ser la referencia arriba, el goleador. Debió serlo el año pasado, pero las lesiones no le dejaron. Está preparado, evidencia la ambición y su entrega en los entrenamientos le acercan a la titularidad, la primera en más de 8 meses. El sueño de volver con todas las consecuencias, está a punto de cumplirse para el paraguayo, un ejemplo para sus compañeros y un icono de implicación para la grada, que le espera desde que se vistió de blanquiazul por primera vez justo hace un año.
Lo normal sería que Raúl González, indiscutible desde que dio comienzo el campeonato, le acompañara en esa primera línea de presión. Su capacidad para crear espacios, recibir de espaldas y asistir dentro del área con su excelente visión de juego, le hacen ideal para compartir espacio con Acuña. El domingo pasado estrenó su casillero de goles, y lo hizo por partida doble. Las rachas de los delanteros, como todas, van y vienen, ahora que está aquí, lo normal es que sea para quedarse... con la titularidad.
El tercero, Isaac Aketxe, es quien más experiencia realizadora posee, el que más artillería ha podido demostrar en las últimas temporadas. Su fuerte carácter y un estado de forma por debajo del suyo ideal, le han impedido explotar en el equipo. Ahora empieza a coger ritmo de competición, pero necesita acumular minutos de exigencia. El otro día, en Pulpí, apenas necesitó cuatro para convertir en tanto una asistencia plena de plasticidad y fortaleza física de Raúl Ruiz. Apareció en el espacio y resolvió el mano a mano con suma naturalidad. Ese es el Aketxe que se firmó en verano y es el que debe aparecer en adelante con mayor asiduidad.
Chuli, en estado de gracia
La inclusión de dos de los tres puntas natos en el esquema de Mora no debería de resultar perjudicial para Chuli, que ha interpretado bien su papel de segundo delantero en ausencia de Acuña y Aketxe. El onubense, con Elliot sin recuperarse de la lesión muscular que padece, le puede llevar a una de las dos bandas para ejercer como interior. Tiene regate, disparo y, sobre todo, capacidad de asociación, algo que, en el Rico Pérez, puede ayudar para dotar a la «jaula» de Mora de pasillos interiores si el rival renuncia a la pelota. Mañana, contra el Levante, se puede reunir toda la artillería del Hércules sobre el césped. «En casa es donde se ganan las Ligas». Palabra del entrenador.
El vasco, que se estrenó como goleador el domingo pasado, apenas necesitó 4 minutos para marcar.
Raúl Gonzalez, titular desde el primer día, que logró dos tantos en el último partido, tiene en 9 su tope realizador.
