Dos empresas de Alicante captan turismo chino para las Hogueras

A las 9 de la mañana ya estaban en el racó de la hoguera Port d´Alacant para maquillarse, peinarse y vestirse con el traje del siglo XVIII. Lo mismo que hicieron ayer cientos de alicantinas. Lo llamativo es que Mae Murong y Wenquian Li, nacieron a miles de kilómetros de España, concretamente en China.

Estas dos jóvenes, empresaria y periodista, se metieron ayer en la piel de dos festeras para vivir las Hogueras desde dentro. Después se encargarán de promocionar las fiestas grandes de Alicante en China de la mano de dos empresas de la provincia que tratan de atraer turistas de un país con un importante potencial turístico.

«Hay que tener en cuenta que en China viven 1.300 millones de personas y el año pasado viajaron por placer 100 millones, con un incremento respecto al año anterior increíble», explica Bea Ponce, de la empresa Nihao and you, especializada en adaptación de destinos y empresas al turismo chino.

Sin embargo, Alicante tiene una dura competencia. «El turista chino no busca sol y playa, si no más bien destinos culturales, así que hay que ofrecerle un producto distinto. Por eso hemos pensado que puede ser una buena idea ofrecer alternativas, como la de participar en las fiestas desde dentro, vistiéndose con los trajes típicos, visitando racós, la mascletà...», señala Jesús Molina, del touroperador Spain Inside.

Y así, como dos alicantinas más, se pasearon ayer por toda la ciudad Mae y Wenquian, con sus móviles en mano para subir al instante a las redes sociales cada detalle que iban captando con sus cámaras.

Visita a una hoguera, desfile de la entrega de premios, mascletà... la agenda fue completa y ellas aguantaron estoicamente las altas temperaturas con los pesados trajes. «El calor no importa», señalaba Wen, quien, afirma no tiene en su país muchas ocasiones «de llevar un vestido tan bonito».

Y aunque en China no hay fiesta que se asemeje a las Hogueras, la pólvora no es tan extraña para ellas. «Los fuegos artificiales nos gustan mucho, aunque sólo los lanzamos en fin de año». Más difícil es entender el final de los monumentos. «Son preciosos, es una pena que se quemen», señalaban. Estos días se siente muy arropadas por todos los integrantes de la fiesta y, de paso, rompen el mito de que los chinos son gente cerrada.