Una buena nueva acompañada de un mal trago. O bocado, mejor dicho. El que los jurados de MasterChef 11 dieron al desastroso brazo de gitano presentado por la concursante vasca Larraitz, que fue la expulsada de la noche de este lunes tras desvelar en el programa, antes incluso de que se enterase su propia pareja o su familia, que espera un bebé.

Ya en la primera prueba de la noche, los jueces del talent show culinario de La 1 de Televisión Española habían advertido cierta "desgana" en la aspirante de Barakaldo, nada habitual en ella, que siempre es voluntariosa y animosa.

Ya con el delantal negro, en la prueba de eliminación, confirmaron que algo no iba bien, pues se vino abajo con los primeros contratiempos sufridos con su test en el mundo de la repostería. Fue entonces cuando Samantha Vallejo-Nágera se dispuso a hablar con ella. "No tengo la cabeza centrada", reconocía la concursante.

"Estoy embarazada y me he enterado aquí"

Al preguntarle el porqué de su distinta actitud, "totalmente apática" ante los retos, Larraitz se venía abajo y anunciaba que "estoy embarazada y me he enterado aquí, y estoy preocupada y no me centro".

Samantha Vallejo-Nágera tras enterarse de la noticia TVE

Tras recibir la efusiva enhorabuena de la jueza, la concursante explicaba que aún no se lo había dicho a su chico porque "estoy mala, tengo las piernas llenas de moratones, de la circulación, de estar de pie tanto rato. Tengo la cabeza que no me funciona lo que tiene que funcionar, claro".

Finalmente el jurado no pudo hacer otra cosa que certificar su expulsión del programa dado que su brazo de gitano distaba bastante de estar bien elaborado. Hasta la propia Larraitz les pidió que no lo probaran.

Su eliminación "salvó" a Tuki y a Leti, cuyos trabajos tampoco estuvieron acertados. En el programa de ayer entró David como nuevo concursante tras superar con buena nota la prueba de repostería.

En esta edición, la de mayor número de participantes de toda su historia, se está dando oportunidad a aspirantes que se quedaron a las puertas. Y es que al emitirse lunes y martes, ambos días con expulsiones, el formato se quedaría muy corto a ese ritmo de salidas. Y aún quedará el clásico programa de repesca.