El Papa Juan Pablo II, en su exhortación apostólica, titulada, "Familiaris Consortio" (número 23), reivindicó la presencia activa de la mujer en la función pública y en las profesiones, sin menoscabo de su papel fundamental en la vida familiar. En este tiempo de crisis económica y social, en el que el trabajo profesional y público escasea tanto, la mujer está expuesta a sufrir desmesuradamente sus consecuencias. El Papa, Juan Pablo II, reivindicó intensamente los derechos de la mujer. Dijo: "No hay duda de que la igualdad y responsabilidad del hombre y de la mujer justifican plenamente el acceso de la mujer a las funciones públicas. Por otra parte, la verdadera promoción de la mujer exige también que sea claramente reconocido el valor de su función materna y familiar respecto a las demás funciones públicas y a las otras profesionales". Por tanto, se pide la integración equilibrada de las dos funciones, la pública-profesional y la familiar, en la actividad de la mujer, para que la evolución social y cultural de la mujer sea verdadera y plenamente humana. ¿Por qué pide el Papa, Juan Pablo II, este respeto a los derechos públicos de la mujer? Lo pide para que, por un parte, se aprecie el valor insustituible del trabajo de la mujer en casa, y, por otra parte, se reconozca el derecho de la mujer a ocuparse de los otros campos de trabajo, profesionales y públicos, lo mismo que el hombre. Y hay una parte especialmente interesante para conseguir esta igualdad de derechos y responsabilidades. Dice el Papa, Juan Pablo II, que "la sociedad debe de estructurarse de tal manera que las esposas y madres, de hecho, no sean objeto de trabajos fuera de casa por necesidad", sino que puedan vivir y prosperar dignamente sin menoscabo de la atención familiar. Y prosigue el Papa: "Se debe superar la mentalidad, según la cual el honor de la mujer deriva más del trabajo exterior que de la actividad familiar". La sociedad debe crear las condiciones adecuadas que hagan compatible el trabajo fuera de la casa de la mujer con la actividad familiar insustituible de la mujer.