El colectivo Alacant en Bici plantea que se contemple un carril bici dentro de la actuación de urgencia prevista en unos meses en el emblemático paseo de la Explanada por los hundimientos en el pavimento. El fin no es otro que prolongar lo que ya existe y completar así una vía ciclista que vaya de la playa de San Juan hasta la sede de la OAMI por el litoral. Las concejalías implicadas parecen dispuestas a estudiarlo. Y es que la ciudad de Alicante ha sido modélica „aunque no lo parezca„ entre los ayuntamientos que apostaron por la bicicleta como medio de transporte alternativo y sostenible. Pero de un tiempo a esta parte parece que pintan bastos. Los más de cien kilómetros de carril bici que discurren por el casco urbano no siempre son cómodos para circular y algunos no terminan de estar conectados entre sí. Además, sólo está permitido atarlas a los «aparcabicis». El servicio público de alquiler de bicicletas (Alabici) pinchó en marzo después de tres años y medio de rodaje. La empresa concesionaria no ganaba dinero con ello y el Ayuntamiento tampoco. Y es que cuando no hay subvenciones o negocio de por medio los servicios públicos se abandonan a su suerte. Así, la mala calidad en el mantenimiento, el vandalismo y la poca difusión para captar abonados hicieron el resto. Sólo en Valencia hay más de 92.000 usuarios, pero aquí no llegábamos a los 100. Y, por otro lado, el recién inaugurado paseo perteneciente al Plan Bahía y que contemplaba un carril bici costero entre la Albufereta y la playa de El Postiguet se ha quedado, por las apreturas presupuestarias, en un sendero «ciclable». A saber: tendrán que compartirlo ciclistas y peatones. Con todo ello, me parece que las peticiones de los colectivos que buscan una ciudad más sostenible y agradable para todos sus ciudadanos pasará al cajón de las facturas olvidadas.
