Será que nos conformamos con poco, o que estar lejos de la tierra afloja el lacrimal. La cuestión es que la comparecencia por partida doble de la ciudad de Alicante en el Telediario del 1 de julio resultó, por desacostumbrada, más que gozosa. Sí, es verdad que la primera información fue tópica, y que es pieza obligada que el día de la operación salida se hable de destinos vacacionales, del sol y el calor. Pero resulta ciertamente curioso que, desde Torrespaña, no eligieran como paradigma de playas abarrotadas las de la Costa del Sol y la Costa Brava, como tantas veces han hecho. Y que desde el centro territorial valenciano, en lugar de enviar a Ferrán Garrido o a quien correspondiese a La Malvarrosa (una playa, dicho sea de paso, que televisivamente queda fatal, porque por más gente que haya siempre parece vacía), mandasen a Izaskun Fernández al Paseo de Gomis para explicar al mundo cómo calentaba el sol en la capital de la Costa Blanca. Pero es que eso no fue todo. Cuando todavía nos encontrábamos en trance hipnótico, saboreando el aroma a sal dejado por la silueta del castillo, llegó la gran sorpresa que no esperábamos. Los del área de Cultura tuvieron la deferencia de incluir en su brevísima sección unas colas del concierto de la coral Contrapunt acaecido en el Aljibe del Castillo de Santa Bárbara la noche anterior. Y la verdad es que aquello sonó a gloria, nunca mejor dicho, y hasta se intuía el frescor que se respiraba bajo sus bóvedas. Quién nos lo iba a decir. Habían dejado fuera el Grec de Barcelona, y a Tarragona, Lleida y Girona. Habían excluido de la página cultural a toda Andalucía, a toda Galicia e incluso a Madrid. Para que luego nos quejemos. Era día 1 y fin de semana de julio. A quienes quiera que fuesen responsables de los nuevos turnos de trabajo, enhorabuena.
