El tiempo pasa muy rápido y todo lo que no se escribe o se va transmitiendo de generación en generación, lamentablemente, acaba por olvidarse; y como he vivido muchos años con los algueñeros y conozco alguna que otra historia, comentarios y chascarrillos, no me gustaría que estas cosas se olvidaran porque son dignas de estar en un libro.
Empezaré diciéndoles, si no conocen Algueña, que al llegar lo primero que verán son las dos torres de la iglesia. Es un pueblo agrícola, su gente es culta, amable y generosa.
Y su gastronomía, algo insuperable: cocido con faseguras, arroz con conejo y caracoles, gazpachos, y qué les voy a contar de la gachamiga, en la casa de Toni en el faldar o en la bodega de mi amigo Primitivo Mira, con buena compañía.
Entre ellos Vicente el de Lola, Esmeraldín, Tonico Saleta, Antonio Riquelme, Juanito Espinosa y mi inolvidable amigo Rafael Segura, y las comilonas que nos hacíamos con nuestro amigo Juanito de Luisa. Y todas estas comidas regadas con el excelente vino de la cooperativa local.
Cuando fui a Algueña en 1968, existía almazara de aceite y quebrador de almendra. Y qué decirles de las carnes y embutidos, de las carnicerías y su mercado de los domingos. Vayan y conozcan este sencillo pueblo.
Una calle para los fundadores de la banda
El motivo de este escrito es para pedir al Excelentísimo Ayuntamiento una calle para los refundadores de la banda de música, que sin el entusiasmo, sacrificio y valentía de aquellas personas, no existiría hoy esa excelente banda.
Pienso que hay suficiente historia y no haría falta presentar al pleno un dossier para su aprobación, porque hoy en día es la institución cultural más importante y es todo un orgullo para Algueña.
Se podría rotular como «Calle de los Fundadores de la Banda de Música», señalando el año y debajo añadiendo los nombres de dichos fundadores: Manuel Sellés, Alejandro Martínez, Pepe Ferescinda, Pepe Rivera, Agustín García, Conrado Abad, Paquico, Toni, Ramón el taxista, Miguelet, Raimundo Galiana, Pepe Sellés, Paco Escandell, Pepe el Blanco, Pepito de Indalecio, Cipriano, Ramoncín, Manolete, Ezequiel, Luis el platillero, el tío Demetrio, Tonico Saleta, etcétera.
No crean que me olvido de todos los alumnos que salieron de la escuela que formamos el tío Manuel Sellés y yo. Jóvenes y mayores músicos y no músicos que tantas cosas me han enseñado y tantas personas que aportaron tanto y cuya lista aquí sería interminable.
«Animo» a escribir sobre la historia de Algueña
Desde aquí animo a todos a que escriban de sus abuelos y padres en relación con la historia de Algueña. Yo, por mi parte, lo único que sé hacer es dedicar unas piezas musicales a persona y al pueblo, como por ejemplo «Mi Toni», «Saleta», «Hermanos Canto», así como mi querido pasodoble «Algueña», además de poner mi magisterio al servicio del pueblo.
Exposiciones sobre instrumentos
A la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento quiero pedirle que de vez en cuando organice exposiciones de fotografías, instrumentos y sobre el archivo de la banda, así como recordar las orquestas de baile, las danzas, conferencias y conciertos para que, sobre todo, la juventud nunca se olvide de sus antepasados. Un fuerte abrazo a todos los algueñeros.
