Los españoles se retratan

El 3,5% de audiencia que logró Las claves el pasado viernes pone a los españolitos de a pie contra el espejo. Que un programa serio, sensato, capaz de abordar el espinoso tema de la salud mental en nuestro país con invitados como con Juan José Millás, Íñigo Errejón y varias especialistas sanitarias, más dos directores de periódicos, realizado en riguroso directo, caiga a la cifra más baja que jamás ha registrado un programa de prime time en La 1, nos retrata.

Por si fuera poco, la víspera, Las tres puertas, el espacio de María Casado, que ella misma define como «el espectáculo de la palabra», marcó un desastroso 4,9%, demostrando la indiferencia con que la audiencia recibe propuestas que le obliguen a pensar, siquiera, un poquito. Mientras tanto, Telecinco y Antena 3, con lo suyo y a la suya, raspaban cuotas de pantalla de 19% y 20%.

Por supuesto que Las claves y Las tres puertas pueden admitir críticas. Pero ese desprecio que han recibido por parte de sus conciudadanos es injusto. Les han dado el portazo por formar parte de una televisión pública que deberían querer y mimar.

Así han sido los estrenos de la nueva Corporación, «desastrosos». De esta manera, la caravana de La gran consulta por las Españas y el lema «La televisión que quieres» deviene en paripé y sarcasmo. La 1 ha vivido su semana horribilis. De momento, la serie Sequía, con su 5%, va a ser sustituida por Maestros de la costura. ¿No sería mejor una Corporación valiente, que de una vez cogiera el toro por los cuernos y ofreciese una televisión de calidad, olvidando los datos de audiencia? El camino es el de Las claves y Las tres puertas. Los perdidos son los espectadores.

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