Mi charla TEDx Málaga

Educación o catástrofe, Miguel Ángel Santos | TEDxMálaga / Miguel Ángel Santos Guerra

Miguel Ángel Santos Guerra

Miguel Ángel Santos Guerra

No sé si el lector o lectora tendrá una idea clara de lo que son las charlas TED o TED Talks. La sigla se forma con las iniciales de Tecnología, Entretenimiento y Diseño. Se trata de una gran iniciativa del siglo XX. Ahora hay más de dos mil charlas TED que se pueden localizar en su página web.

Richard Saul Wurman fundó esta conferencia en el año 1984. Posteriormente, en el año 2002, cedió todos los derechos a Chris Anderson. Actualmente es propiedad de The Sapling Foundation. Es una organización sin ánimo de lucho que pretende difundir ideas poderosas que mejoren el mundo, ideas que sean dignas de ser difundidas. Los temas pueden estar relacionados con la educación, el medio ambiente, la tecnología, la ciencia, el arte, la robótica, la lectura, la música, la alimentación, la psicología…

Ha habido muchas charlas TED y TEDx impartidas por personas famosas: Bill Gates, Ashley Yudd, Bill Clinton, el papa Francisco, James Cameron, Stephen Hawking, Al Gore, Yanis Varoufakis, António Guterres, Julian Assange, Peter Gabriel, Sting..., aunque no es necesario ser una persona relevante o conocida para ser un ponente TED. Cualquier persona de a pie puede vivir esa experiencia.

¿Existe alguna diferencia entre charla TED y TEDx? Sí, la hay. Las charlas TED son las originales de esta fundación. En cambio, las charlas TEDx están organizadas por promotores independientes que han conseguido permiso para llevar a cabo estos eventos. Así es posible encontrar la denominación TEDx seguida del nombre de la ciudad (o lugar) donde se llevan a cabo: TEDx Barcelona, TEDx Módena, TEDx Providence o TEDx Málaga, entre otros cientos.

Mi amiga Montse Chinchilla me sugirió que enviase una grabación con una idea para concursar al proceso de selección de ponentes para un evento de charlas TEDx Málaga que iba a tener lugar el día 8 de octubre de 2022. Faltaban muchos meses para que llegase la fecha. Así lo hice y, pasados unos días, me llamó para decirme que había quedado en el segundo puesto entre más de cien concursantes. Y en ese momento empezó la singular aventura.

Nunca pude imaginar el largo y complejo proceso que iba a suponer la preparación para intervenir desde el punto rojo en el Palacio de Congresos de Málaga casi un año más tarde. Ni una sola persona de quienes nos escucharon el día 8 de octubre podría imaginar el largo camino que habíamos recorrido.

Las charlas TED tienen varias exigencias que es necesario tener en cuenta. La primera de ellas es el tiempo. Ninguna intervención puede sobrepasar los 18 minutos. La recomendación es que no lleguen a los 15. Yo tuve una lucha contra el tiempo. Mal de profesores. Decía Lauro de Oliveira: “Mi profesor es como el perro de Paulov: en cuanto suena la campanilla, empieza a salivar”. El día de la intervención utilicé un reloj en el que iba viendo cómo corrían velozmente los minutos. Mi intervención no pasó de los 14. Para ese cuarto de hora (la intervención más breve de mi vida), he tenido la preparación más larga y más intensa sin comparación posible.

La segunda exigencia tiene que ver con el contenido. No se trata de una larga y estructurada presentación de ideas sino de una idea central que tenga fuerza y que genere interés. La palabra “poda”, “poda”, “poda” era frecuente en los primeros ensayos de todos los ponentes. Mi intervención estaba centrada en las palabras de su título: Educación o catástrofe. Expliqué por qué es importante la educación para las personas y las sociedades. “La historia de la humanidad es una larga carrera entre la educación y la catástrofe”, dice Herbert Wells. Expliqué lo que es educación (aprender a pensar, aprender a convivir) y la diferencia que existe entre educación e instrucción (no hay conocimiento útil si no nos hace mejores personas), de socialización (una cosa es incorporarse con éxito a la cultura y otra ejercitar la dimensión crítica y ética de la educación) y de adoctrinamiento (el adoctrinador no es un maestro, es un fanático ya que impone los valores por la fuerza). Para realizar esta tarea tan hermosa, difícil y necesaria es preciso elegir y formar a los mejores profesionales del país, no a quien no sirve para otra cosa. Me despedí contando la historia de la manzana que soñaba con ser una estrella, historia que un día conté en este mismo espacio.

La tercera exigencia es la actuación de coachs que siguen el proceso de preparación y asesoran a los ponentes con minuciosas sugerencias relacionadas con el contenido, el tiempo y la expresión. Fruto de la experiencia, los organizadores de las charlas TED han ido elaborando un Manual del Orador. Hay muchas sugerencias de interés sobre la estructura de la charla, sobre el uso de diapositivas, sobre la gestualidad, sobre el tiempo, sobre la entonación, sobre la mirada…

Otra exigencia peculiar es la celebración de reuniones periódicas de todos los ponentes (querida Lydia, cuántos esfuerzos de coordinación, cuánto tiempo construyendo un hermoso equipo). Reuniones, on line en nuestro caso, en las que nos conocíamos, nos relacionábamos en torno a un libro, a un objeto o a una foto de nuestra infancia… De hecho, toda esa trayectoria ha generado un clima intenso de comunicación afectuosa. De hecho, estamos preparando algunos encuentros para mantener vivo el rescoldo de la amistad que se fraguó durante la experiencia.

Una última característica es que las charlas TED no tienen remuneración. Tampoco los organizadores y coachs reciben honorarios por su trabajo. Es una actividad generosa que se realiza en bien de la sociedad. Los ingresos de las entradas se destinan a sufragar los gastos que genera un evento tan complejo.

Antes de la intervención tuvimos unos intensos minutos de meditación, que nos ayudaron a profundizar en el sentido profundo de lo que íbamos a hacer en presencia del público, que ya llenaba el auditorio.

Mi charla TEDx Málaga tuvo lugar en el Palacio de Congresos y Exposiciones ante un auditorio de mil personas. Aunque habitualmente me ayudo en mis conferencias de un power point, en este caso decidí prescindir de él. Pensé que la atención no debería dispersarse. Además de las doce intervenciones, hubo durante esa jornada actividades musicales, artísticas y humorísticas que llenaron un día intenso y precioso…

Quien escuche alguna charla TED podrá comprobar que se imparten siempre desde un gran punto rojo sobre el que el ponente se sitúa y del que nunca se sale. Es uno de los elementos que configuran la magia de las charlas TED. También las letras de esta sigla aparecen en color rojo intenso.

Se estructuraron las intervenciones en cuatro bloques. Después de cada uno, se reservó un espacio y un tiempo para que los asistentes pudiesen dialogar con los ponentes de cada bloque.

Las charlas TED son interesantes, tanto por su contenido como por su forma. Por eso se puede aprender mucho de ellas. El contenido es la información que transmiten los ponentes, los datos y ejemplos que utilizan. La forma es la manera en que se hacen y eso es lo que nos interesa cuando tratamos de mejorar nuestra forma de hablar en público.

El modelado es una técnica que permite aprender de otros a través de la observación. Viendo charlas TED se puede uno modelar como orador y afianzar un estilo personal. Hay que poner atención en la forma de moverse, gesticular, modular la voz y transmitir la información de cada ponente. No se trata de copiarles, sino de analizar su estilo para identificar recursos que puedan resultar útiles. También para aprender de sus aciertos y desaciertos. La técnica del modelado se denomina también  aprendizaje vicario o aprendizaje observacional. El psicólogo Bandura es el corifeo de estos planteamientos.

Después del evento se ha necesitado un largo tiempo de un mes para montar y editar las charlas con el fin de ponerlas en circulación. Algunas se traducen a otros idiomas y llegan a alcanzar millones de reproducciones.

Ha sido para mis compañeros y para mí una hermosa experiencia. He vivido desde dentro un proceso que no conocía. Y eso siempre está impregnado de situaciones de aprendizaje.

Todavía no hemos visto el efecto expansivo de las ideas ya que, hasta ahora, solo han llegado al público asistente. Pero la gran pretensión de TED es la difusión del pensamiento. Faltan unos días para su lanzamiento.

Abrí mi charla TED con una leyenda persa y con ella voy a cerrar este artículo. Dice así: al comienzo de los tiempos, los dioses repartieron la verdad dando a cada persona un trocito. Para reconstruirla hace falta poner el trozo de cada uno. Nosotros pusimos el día 8 de octubre nuestro pequeñito trozo y desde aquí invito a que cada uno ponga el suyo en su vida familiar, profesional y social. Verdad y comunicación serían así las dos caras de una misma moneda.