Turismo sostenible

Turistas británicos abarrotando la terraza de un bar de Benidorm.

Turistas británicos abarrotando la terraza de un bar de Benidorm. / DAVID REVENGA

Paco Pepe

Personas ecologistas sostienen que el turismo desorbitado ha generado una transformación del paisaje, destruyendo ecosistemas, empobrecimiento y contaminación de los suelos, afectación severa de la flora y arruinando incluso playas, aunque creo que algo exageradas estas aseveraciones.

En principio el turismo siempre ha sido una entrada de divisas para los países visitados, ya que en general las personas visitantes hacen compras, gastan en restaurantes, optan por servicios locales, como transportes sostenibles y visitan museos y obras de arquitectura por las que pagan la entrada.

Está claro que ciudades como Venecia y Amsterdan han prohibido los transatlánticos gigantes, pues dicen las autoridades de esas ciudades que contaminan como cientos de camiones quemando combustible, y alegan también que los pasajeros que desembarcan para ver la ciudad apenas gastan dinero, aunque esto no ha podido ser verificado fehacientemente.

Se opina que debemos elegir destinos menos masificados, pero no se puede saber hasta que no estás en el lugar de visita. Se dice también que debemos ser respetuosos con el medio ambiente y el entorno, aunque esto sea de la privacidad de cada uno.

Pienso también que debe cuidarse el atuendo que llevar en las ciudades, estar debidamente vestidos, sobre todo si entramos en Museos, Iglesias e instituciónes públicas, dando ejemplo de respeto hacia los habitantes del lugar.