El Consell ha adjudicado a Avialsa -una empresa implicada en el caso de Serafín Castellano- el contrato del servicio de aviones de extinción de incendios forestales para los meses de septiembre y octubre, por un precio de 1,27 millones de euros, para cubrir este periodo hasta el 1 de noviembre en que se iniciará el nuevo contrato con la empresa. El pleno del Consell dio ayer el visto bueno para tramitar de emergencia la contratación para estos dos meses ante la imposibilidad de iniciar de nuevo el contrato antes del 1 de noviembre, según informó ayer la vicepresidenta, Mónica Oltra. El contrato con Avialsa finalizó en febrero y era improrrogable. La Generalitat comenzó a trabajar en uno nuevo, pero se «ha eternizado» por cambios normativos y porque a finales de julio se presentó un recurso especial en materia de contratación que obligó a suspender el procedimiento», añadió la también portavoz.