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El PSPV cierra filas públicamente con el alcalde de San Vicente y maniobra para evitar otra moción

La dirección nacional visitará el próximo lunes el municipio para expresar su «respaldo incondicional» a Jesús Villar ante el conflicto con el sector liderado por José Luis Lorenzo

José Luis Lorenzo, a la izquierda, y el alcalde, Jesús Villar, en el centro, juntos a concejales socialistas del anterior mandato.

La crisis que se está viviendo en San Vicente del Raspeig tiene todos los ingredientes para convertirse en un nuevo laberinto político -el enésimo- para los socialistas de la provincia. El PSPV cerró este jueves filas públicamente con el alcalde de San Vicente del Raspeig, Jesús Villar, ante el grave conflicto que el partido está sufriendo en el municipio y que hace tambalear la estructura municipal ante la profunda desunión entre dos grupos. Los principales responsables de la dirección nacional del partido visitarán el próximo lunes la ciudad para mostrar públicamente su «respaldo incondicional» a Villar y, según indicaron a este medio, ya han comenzado a investigar los hechos para tratar de evitar, además, una posible moción de censura. Eso sí, todavía no han tomado una decisión en firme sobre los pasos que van a adoptar.

En círculos socialistas sobrevuela el temor de que el sector liderado por el concejal José Luis Lorenzo impulse una moción de censura que les haga perder otra alcaldía en la provincia, que se sumaría a las tres mociones que el PSOE ha tratado de evitar, sin éxito, en La Torre de les Mançanes, Agres y recientemente en Teulada, donde el PP ha pactado con dos exediles socialistas para apartar a Compromís del gobierno.

En el caso de San Vicente, la dirección nacional del PSPV prefiere no dar pasos en falso que le puedan hacer perder un ayuntamiento de más de 50.000 habitantes y de su valor estratégico, al ser considerado durante la época de Luisa Pastor como uno de los feudos consolidados del PP en la Comunidad. Casualmente, se cumplen 20 años desde que San Vicente viviera una situación que recuerda a la actual. En 2001, una crisis dividió al socialismo sanvicentero. Fue exactamente en el mes de octubre cuando un sector del PSOE entregó, a través de una moción de censura, la Alcaldía al PP, con Luisa Pastor a la cabeza, quien fuera alcaldesa del municipio entre 2001 y 2015 y presidenta de la Diputación entre 2011 y 2015, cuando cedió el cargo a César Sánchez. 20 años después, esos acontecimientos están más presentes que nunca. De hecho, fuentes socialistas reconocen que esta crisis se asemeja a la de hace 20 años, cuando José Gadea, exconcejal de Urbanismo y un histórico de la formación, fue uno de los protagonistas del enfrentamiento con el exalcalde que acabó dinamitando al equipo de gobierno. Tras una retahíla de reproches y acusaciones cruzadas, Gadea y algunos de los ediles socialistas optaron por aliarse con el PP para plantearle una moción de censura a Francisco Canals. Con esta maniobra dieron el gobierno en bandeja a Pastor, un mandato que luego revalidaron las urnas al otorgarle la mayoría absoluta. En círculos socialistas aseguran que Gadea, que algunos lo denominan el Ángel Franco sanvicentero, está detrás ahora de esta nueva crisis.

Hace justo 20 años la ciudad vivió una crisis similar a la actual, que dividió al socialismo sanvicentero

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La dirección del PSPV ha querido dejar claro que no está mirando hacia otro lado y que no va a «consentir» que ocurra algo similar. En primer lugar, han cuestionado el expediente disciplinario que la Comisión Ejecutiva Municipal ha anunciado y que se elevará después a la dirección del PSPV para que se pronuncie sobre la crisis. Confían en que este expediente llegue a Valencia para poder tomar cartas en el asunto e insisten en que en estos momentos necesitan criterios objetivos para poder manifestarse, aunque no dudan en reconocer que apoyan sin fisuras a Villar. El PSPV estudia la posibilidad de tomar medidas contra la Comisión Ejecutiva Local, aunque, según apostillan, es momento de seguir los trámites y estudiar lo que está ocurriendo para no dar pasos en falso, en clara referencia al temor de que los ocho concejales socialistas del sector de Lorenzo puedan presentar una moción con Ciudadanos, o con PP y Vox. De hecho, en círculos socialistas se le reprocha a Villar que transigiera con una lista impuesta por el sector sanchista.

Según los socialistas, en estos momentos no está sobre la mesa crear una gestora porque no se cumplen los requisitos, aunque insisten en que se está a la espera de que el expediente se remita a València y advierten de que este documento se puede volver en contra de la facción que lidera José Luis Lorenzo. Como primer gesto, el secretario de Organización, Jose Muñoz, y el secretario general de los socialistas en la provincia, José Chulvi, han organizado una rueda de prensa para el próximo lunes con la finalidad de expresar públicamente que dan todo su apoyo a Jesús Villar.

El alcalde ganó las elecciones en 2019 y logró 10 concejales, justo el doble de los obtenidos hace cuatro años. «Tengo más oposición dentro que fuera. Creo que el único objetivo es hacerme la vida imposible y que termine cayendo», dijo Villar. Por su parte, José Luis Lorenzo no contestó ni las llamadas ni a los mensajes de este diario.

La Marina, otro de los focos de conflicto para los socialistas

Al PSPV se le acumulan los problemas en la provincia. La Marina Baixa y, sobre todo, la Marina Alta son los principales focos de tensión para los socialistas alicantinos. En la Marina Baixa, el epicentro de las desavenencias está en Callosa d’en Sarrià, donde la falta de acuerdo entre los concejales del PSOE y Compromís mantiene al PP al frente del Ayuntamiento. En Teulada, el PP provincial ha avalado una moción de censura con los dos tránsfugas socialistas. Pero, además, los conflictos se acumulan en El Verger, Els Poblets, Xàbia, Dénia y Pedreguer.

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