Los cuatro diputados de Ciudadanos (Cs) que han abandonado su grupo en las Cortes Valencianas quieren contar con sus propios asesores, seguir utilizando las plazas de aparcamiento que les fueron asignadas al inicio de la legislatura y percibir cualquier emolumento que les corresponda para desarrollar sus funciones parlamentarias. Y lo quieren rápido. Jesús Salmerón, José Antonio Martínez, Cristina Gabarda y Sunsi Sanchis han registrado un escrito dirigido a la Mesa del Parlamento en el que apremian a que se les garanticen sus derechos como diputados autonómicos y que se haga a la mayor brevedad. Todo ello mientras la formación naranja, con la que concurrieron a las elecciones y obtuvieron sus escaños, les sigue reclamando que devuelvan el acta.
Los cuatro tránsfugas, que han pasado ahora a ser considerados diputados no adscritos, han solicitado a la Mesa de las Cortes que se les informe de forma exacta de los medios materiales y personales que van a recibir y, exactamente, con qué periodicidad de acuerdo al reglamento de la Cámara. A ese respecto, defienden que cada diputado tiene derecho a la asignación de una cantidad mensual para atender los gastos derivados del ejercicio de sus funciones y lo que quieren es que se les concrete cuáles son los gastos que son susceptibles de ser atendidos.
En su escrito, los no adscritos subrayan que la Mesa acordó aprobar una asignación individual por diputado para la contratación de personal, y lo que solicitan es que se les informe de los mecanimos para poder hacer uso de ellos y así poder contratar personal necesario para el desarrollo de sus funciones.
Otra de las cuestiones solicitadas, y que ha ha sido atendida de forma favorable, es su incorporación como portavoces en las siguientes comisiones: Martínez, en la de Justicia, Gobernación y Administración Local; Gabarda, en la de Política Social y Empleo; Salmerón, en la de Obras Públicas, Infraestructuras y Transportes; y Sanchi en la de Educación y Deporte.
Los cuatro diputados abandonaron el grupo de Ciudadanos tras la deblace del partido en las elecciones del 4-M y entre fuertes críticas al rumbo que ha tomado ela formación. En un comunicado, destacaron que, "desde hace más de un año, con la nueva dirección del partido, hemos observado como Cs ha ido abandonando los principios liberales que nos llevaron a sumarnos a este proyecto. Conseguimos grandes resultados electorales y aportamos soluciones reales a los valencianos y españoles. Sin embargo, hoy vemos como se confirma el giro ideológico de Cs para seguir siendo una muleta del sanchismo. No nos sumamos al partido para ir de la mano de Sánchez y de toda su tropa que quiere destruir España y la Comunidad Valenciana".
La marcha de los cuatro diputados ha abierto la veda a lo que será una cascada de fugas del partido en la provincia y en la Comunidad que ya ha comenzado, exactamente en Villena, con las dos concejalas Mari Carmen Clemor y María Gracia Serrano, quienes anunciaron que abandonaban el partido por la «intolerancia interna» que han sufrido por parte de los cargos provinciales, autonómicos y nacionales.
